Violento robo al dueño de un restaurante
Un hombre junto a sus hijos fueron víctimas de un asalto a plena luz del día sobre la colectora del Acceso Oeste.
En el último día del 2020, un hombre se acercó a su local gastronómico ubicado sobre la colectora del Acceso Oeste, en Ituzaingó, para recoger la recaudación del día y luego disfrutar del fin de semana largo junto a sus hijos en Tigre. Pero sus planes se vieron frustrados tras ser asaltado violentamente.
Un grupo de delincuentes a bordo de un VW Gol Trend, que circulaba por la colectora, a metros del puente Quintana y del Acceso del Buen Ayre, sorprendió al empresario y a su familia y, en un puñado de segundos, le robaron la camioneta.
Al ver el vehículo sobre la vereda frente al restaurante cerrado, los cuatro delincuentes decidieron dar la vuelta y abordar a Pablo, el dueño del lugar que estaba acompañado por sus hijos, quienes fueron bajados violentamente de la camioneta y asaltados en el lugar.
Todo fue registrado por las cámaras de seguridad del municipio de Ituzaingó y del restaurante de la víctima. Allí se ve cómo cerca de as cinco de la tarde del 31 de diciembre de 2020 cuatro hombres se bajan de un auto verde, algunos de ellos armados, y abordan con violencia a un grupo familiar dentro de una camioneta color bronce, los hacen descender y uno de ellos se la lleva rápidamente mientras que el resto se encarga de llevarse las pertenencias de las víctimas. Hasta el momento la policía no logró dar con la camioneta 4x4.
"Fue un asalto agresivo. Para mi fue al voleo porque no se suponía que yo iba a estar en el negocio ese día", contó Pablo en diálogo con TN, donde agregó que su negocio había estado abierto solamente al mediodía.
Además detalló: "Estaba con mis dos hijos y el novio de mi hija, nos interceptaron con la camioneta en marcha. Se llevaron relojes, cadenas, tenía efectivo porque íbamos a pasar el fin de semana de año nuevo en Tigre, venía de sacar la plata del negocio para evitar que un amigo de lo ajeno se lo lleve, pero fue en vano".
Resignado, el empresario gastronómico relató que ya fue víctima de tres robos en los últimos cinco meses en tres municipios distintos de la provincia: "No les importa nada a los delincuentes porque saben que no pasa nada. El Gran Buenos Aires es un desastre. Hasta que no se den cuenta que nos están matando vamos a seguir con la misma".