Siempre hay que animarse a más, suelen alentar los entrenadores a los deportistas. En este caso, Primoz Ravnik se lo tomó en serio. Desde una represa de Eslovenia bajó junto a su bicicleta desde lo más alto. Registró las imágenes a través de una cámara que ubicó en su casco.
Finalmente terminó dando contra el agua. Mira lo que es la caída.