Un grito en la calle, una víctima sorprendida y un operativo policial que se activó en segundos. El robo ocurrió en la intersección de Avenida de Mayo y Sáenz Peña, en pleno barrio de Monserrat, cuando un grupo de motochorros le arrebató el celular a un transeúnte y escapó a toda velocidad. Lo que no sabían es que las cámaras del Centro de Monitoreo Urbano (CMU) ya los estaban enfocando.
La alerta ingresó al 911 y de inmediato la División Investigaciones Comunales 1 Sur de la Policía de la Ciudad acudió al lugar. La persecución fue inmediata. El primero de los sospechosos fue interceptado a seis cuadras, en San José y Chile. El segundo cayó casi al mismo tiempo, gracias a una cápsula de Despliegue de Intervención Rápida (DIR).
Pero aún faltaba un tercer implicado: el conductor de la moto, que había escapado por otra dirección.
Los operadores del CMU siguieron su ruta en tiempo real. La moto dobló por Chile al 1300 y desapareció. Pero cuando los oficiales llegaron a esa cuadra, un vecino permitió el ingreso a una vivienda. Dentro de la propiedad estaba el tercer delincuente, intentando esconder la moto con la que habían huido tras el robo.
Durante la requisa —realizada en presencia de testigos—, la víctima logró reconocer su celular, que le fue devuelto en el acto. También se secuestraron otros dos teléfonos y el vehículo utilizado para cometer el delito.
Los tres detenidos tienen 22 años: dos son argentinos y uno de nacionalidad paraguaya. Todos quedaron a disposición del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°61, a cargo del Dr. Edmundo Rabbione.