Tigre

"Desperté por los gritos de mi hija envuelta en  llamas"

El padre de la joven prendida fuego acusa a su pareja y dice que realiza "macumbas". Ella está muy grave en un hospital de San Fernando. "Su hijo de 3 años vio todo", dicen.

Una joven de 21 años resultó gravemente herida con quemaduras en el 35 por ciento de su cuerpo en el partido de Tigre. Los familiares de la chica aseguraron que no se trató de un accidente y acusaron a su concubino, de quien dijeron que realiza "macumbas".


Fuentes policiales aseguraron, en tanto, que la pareja de la víctima, que también sufrió lesiones pero leves, permanecía esta tarde a disposición de la Justicia, aunque por el momento no se hallaba ni detenido ni demorado.


El hecho ocurrió ayer al mediodía, en su vivienda ubicada en la calle Curupaytí al 400, de la localidad de Troncos del Talar, en el norte del Conurbano, donde Alexia Villalba (21) reside junto a un joven, llamado Sergio Peralta.


En momentos en que se encontraban los dos juntos en un sector del inmueble, que está situado en el mismo terreno que la casa de los padres de la chica, Villalba fue rociada con nafta y quemada, dijeron los informantes.


Julio, padre de la joven, contó esta tarde a la prensa que él dormía cuando ocurrió el episodio y que se despertó por los gritos de su hija, a quien encontró envuelta en llamas.


"Mi hija se estaba quemando, así que traté de sofocar (el fuego), sacándole toda la ropa. Agarré una sábana, le puse una remera y la llevé al hospital", relató el hombre.

 
Consultado de qué hacía Peralta en esas circunstancias, Julio dijo que el muchacho trataba "de sofocar el fuego" pero su hija "lo rechazaba, le decía que salga de encima y que no la toque".

 

En tanto, un tío de la víctima, que se identificó como Claudo, dijo que "el nene vio todo, tiene 3 años", en referencia al hijo de la mujer que se encontraba en el lugar.


Según las fuentes, tanto Villalba como su pareja fueron trasladados cerca de las 15 al Hospital Petrona de Cordero de San Fernando, donde los médicos constataron que la chica presentaba quemaduras en el 35 por ciento de su cuerpo y él algunas leves.


Carlos Maiorano, director del hospital, contó a la prensa que hasta esta mañana la joven se encontraba en "grave" estado, internada en terapia intensiva, "con asistencia respiratoria mecánica" y con un cuadro en el que "la muerte está siempre presente".


"(Tiene quemaduras) en el treinta y cinco por ciento de la piel, en parte de la cara, el cuello, la parte anterior del torso, el abdomen y la raíz de los muslos, y también en la vía aérea superior", dijo Maiorano, y agregó que al llegar al hospital la joven tenía "olor a algún tipo de combustible en la ropa".

 

En cuanto a las quemaduras de Peralta, Maiorano detalló que "son menores". "Es un diez por ciento aproximadamente de su cuerpo, y fundamentalmente las quemaduras están en las manos, en los dos antebrazos y un poco en cuello y en parte inferior de la cara", precisó.


Maiorano agregó que ayer estuvo presente en el hospital personal de la Unidad Funcional de Instrucción temática de género del Departamento Judicial San Isidro, a cargo de la fiscal Marcela Semería, que le tomó declaración a Peralta.


En tanto, las fuentes policiales consultadas indicaron que hasta esta tarde no se había ordenado la detención del muchacho. Sin embargo, para el padre de Villalba, Peralta "es el culpable" de lo que le sucedió a su hija.


"En el viaje (al hospital) lo primero que él me dijo fue que agarró un bidón con nafta que estaba ahí, que lo inclinó hacia arriba, que estaban jugando los dos y que se destapó el bidón y que se prendió fuego. Pero la cuestión es que se prendió fuego mi hija y no él", indicó.


"En mi forma de expresar, no fue un accidente", aseguró Julio, quien dijo desconocer si al momento del hecho se había producido una discusión de pareja.


"Puede llegar a tener un vínculo con las cosas que ellos practican (por Peralta y su familia), tengo entendido que la macumba", señaló.


Luego, el padre de Villalba recordó que no existían antecedentes de violencia en la pareja y que el bidón con nafta con el que supuestamente rociaron a su hija estaba en la casa porque era usado para la máquina de cortar pasto.


"Ellos convivían en mi casa. Y el tiempo que estuvieron fue diez puntos. A él no le vi nada malo y a ella tampoco. Nunca los vi en discusiones frente mío y de mi señora", concluyó.

 

2 de enero de 2013

 

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