El psicólogo Mich y su "Baile de la banana"
Integrante de la camada mediática de Jacobo Winograd, el Larva y Guido Suller, sepultada por los ex GH, Mich quiere recuperar el terreno perdido. Admira el video.
Volvió. Él siempre está volviendo. Con su pelo largo y castaño o rubio y corto, sentado en la mesa junto con Marcelo Polino o en el living de Infama, a la derecha de Santiago Del Moro, aunque su última aparición –y la más mediática de los últimos tiempos- se produjo en el programa que conduce Susana Roccasalvo.
La invitada saliente de la tarde del cable era Zulma Lobato. El travesti de Villa Ballester que cobró protagonismo al presentarse en Crónica TV y cantar acapella la canción Resistiré. A la producción se le ocurrió una idea "genial" para darle una vuelta de tuerca más y no aburrir con la ultra conocida historia de la nueva figura, que veía cómo su reloj biológico acercaba las agujas al número tres, dejando pasar sus quince minutos de fama. Se contactaron con otro mediático, amante de los berrinches pero psicólogo. Mich aceptó, feliz. Era la vuelta a la tevé.
Asistió, prolijo y puntual. Se sentó a la derecha de Zulma en el living compuesto por tres sillones. Esperó la presentación de la conductora y, tras el saludo de Susana, comenzó con su perfil sobre el personaje en cuestión. Bah, lo intentó. La sexta palabra de su discurso desató la barbarie: "Lo que pasa con este señor…". Escándalo. Zulma le saltó a la yugular, agredió a quienes osaron separarlos y, luego de largo rato, se calmó.
A partir de entonces la imagen de Lobato comenzó a esfumarse de la caja boba, al menos por ahora; mientras que el psicólogo recuperó parte de su terreno perdido. Para eso no tardó en recordar viejas épocas con una táctica pragmática: difundió vía e-mail el videoclip grabado en tiempos de bonanza. Confía en su talento, usted dirá si hace bien…
La invitada saliente de la tarde del cable era Zulma Lobato. El travesti de Villa Ballester que cobró protagonismo al presentarse en Crónica TV y cantar acapella la canción Resistiré. A la producción se le ocurrió una idea "genial" para darle una vuelta de tuerca más y no aburrir con la ultra conocida historia de la nueva figura, que veía cómo su reloj biológico acercaba las agujas al número tres, dejando pasar sus quince minutos de fama. Se contactaron con otro mediático, amante de los berrinches pero psicólogo. Mich aceptó, feliz. Era la vuelta a la tevé.
Asistió, prolijo y puntual. Se sentó a la derecha de Zulma en el living compuesto por tres sillones. Esperó la presentación de la conductora y, tras el saludo de Susana, comenzó con su perfil sobre el personaje en cuestión. Bah, lo intentó. La sexta palabra de su discurso desató la barbarie: "Lo que pasa con este señor…". Escándalo. Zulma le saltó a la yugular, agredió a quienes osaron separarlos y, luego de largo rato, se calmó.
A partir de entonces la imagen de Lobato comenzó a esfumarse de la caja boba, al menos por ahora; mientras que el psicólogo recuperó parte de su terreno perdido. Para eso no tardó en recordar viejas épocas con una táctica pragmática: difundió vía e-mail el videoclip grabado en tiempos de bonanza. Confía en su talento, usted dirá si hace bien…