La humedad desahuciaba ese martes por la mañana. El fin de semana estaba muy cerca de haber pasado y el próximo se veía muy lejos, pero un aviso hizo sonar las trompetas: “Lu, toca Dancing Mood en Niceto”. Me bastó para una sonrisa y respuesta rápida: “Vamos”.
Agradecí la invitación y el bajo costo de la entrada para mis bolsillos todavía sin cobrar, 15 pesos en la puerta (Niceto Vega 5510, Palermo) y 10 pesos las primeras cien anticipadas.
La tarde de trabajo se pasó volando por la causa noble: “Martes de Carnaval en Niceto Club”. Me imaginaba con los pies rebotando, los brazos sueltos, la cabeza yendo y viniendo al ritmo que Dancing supo lograr conjugando el ska y el reggae con matices jazzeros. Un sonido identificable como propio, la mejor gracia que puede lograr cualquier banda, escucharlos y reconocerlos: “Son ellos”.
Foto: kvk. |
Estaba buscando “el lugar” para ubicarme, con un salón casi completo, cuando la trompeta de Hugo Lobo, líder de esta big band, empezó a sonar. Entonces recordé el tiempo que había pasado desde la última vez que los vi y festeje haber dejado de lado el cansancio. Tenía la tranquilidad de saber que Dancing Mood es garantía de un buen show, y se reconfirmó.
Acompañados siempre con algún invitado “deluxe”, esta vez se sumaron: Pablo Lescano de Damas Gratis con su rápido teclado; Joni Mastroiani, vocalista de Suburband (banda de reggae oriunda de Lanús que viene sumando) y Pablo, aclamado cantante del Ander reggero.
Con un paseo por toda su discografía, el regalo de algunos covers de The Skatalites (su conjunto jamaiquino de referencia), y los solos límpidos de cada instrumento que sacan el aliento, el público despegó.
Haciendo caso omiso al calor que ya se notaba bastante, ellos y nosotros vibramos por 2 horas. Cuando de repente me di cuenta estaba envuelta con los más jóvenes del frente saltando y coreando.
Los resabios del martes habían quedado en el sudor de alegría. No se despidieron sin pedir “Un tren como la gente”, tradicional en estas presentaciones. Los tímidos se acoplaron y todo Niceto fue de adelante hacia atrás en círculos, cerrando un corte de semana impecable.
Gentileza Revista Filo