El atraco fue perpetrado minutos después de las 3 de la madrugada en la joyería Testa, propiedad de Fabián Testa, ubicada en avenida 7 n° 1.140. A esa hora, Omar Gómez, sereno de un local lindero, escuchó ruidos. “Oí algo en los techos y enseguida sonó la alarma; supuse que estaban robando. Después llegó la policía”, relató Omar Gómez a Diagonales.com.
El propio Testa dijo a este medio que el monto del botín ascendería a unos 300 mil pesos aproximadamente. Y relató que los ladrones, en principio, rompieron el techo y luego hicieron un boquete en una pared que da a un patio para entrar al comercio. “Lo extraño es que no violentaron la caja de seguridad”, reveló a Diagonales.com. Además, contó que se llevaron una escalera que habrían usado para bajar de algún techo, especuló.
Testa agregó no tener asegurada toda la mercadería por los altos costos que implica hacerlo. “Me avisaron a las seis de la mañana lo que había pasado. Me levanté y me metí debajo de la ducha, con agua fría. Después, más calmo, vine para acá”, contó desde el lugar del robo, donde peritos policiales levantaban huellas.
Cuatro años atrás, ladrones hicieron un boquete en una pared que da al edificio donde ahora funciona una unidad básica. Pero no alcanzaron a robarle: sonó la alarma y –aquella vez– la velocidad de los agentes de seguridad evitaron el atraco.
12 de abril de 2012