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Oyendo vecinos enojados, debutó CABA en Lugano

Sabado, 06 de mayo de 2017 a las 18:30
Plantados para dar batalla al espacio Neo Conservador que gobierna La Ciudad desde hace diez años, ayer al mediodía debutó "en La calle" la Corriente Amplia por Buenos Aires (CABA), el espacio politico donde van confluyendo agrupaciones de raíz peronista y otras vinculadas al progresismo porteño. Y en el que se destacan las figuras de Alberto Fernandez en su vuelta al peronismo porteño (después de su autoexilio en el massismo) y de Patricia Vaca Narvaja, que regresa a su "primer amor" después de ser embajadora en México.


La elección del barrio de Lugano para que CABA hiciera su primer acercamiento militante, no fue casual. Ex bastión justicialista, las últimas elecciones de 2015 marcaron el crecimiento electoral del macrismo en el populoso barrio. Pero es justamente a partir de la llegada de Macri a la Casa Rosada, cuando La batería de medidas económicas (devaluación del 60%, apertura indiscriminada de importaciones y tarifazos de luz, gas y agua) tomadas por Cambiemos impacto fuerte en todo el Sur de La Ciudad en general y en Lugano en particular.
Con ese diagnostico, Fernández y Vaca Narvaja convocaron a los vecinos de Lugano en la esquina de Chilavert y Guaminí. Que recogieron? "Un combo de preocupaciones que cruza a todos los sectores. Las mujeres, por la suba de precios y tarifazos. Los jubilados por los recortes en el Pami y la suba en los medicamentos. Y los comerciantes por la fuerte caída de ventas y el miedo a tener que cerrar sus negocios", explica Vaca Narvaja.
Un escalón más abajo en los reclamos estuvo la inseguridad por el crecimiento exponencial de los robos y secuestros.
Tras una hora y media de caminar y escuchar a los vecinos de Lugano, CABA puso primera en su estrategia de recrear un espacio político multisectorial con innegable impronta peronista.
El desafío para Alberto Fernández y Vaca Narvaja estará en ir sumando sectores sindicales y sociales, que les permita consolidar una identidad opositora a las políticas neoliberales de ajuste, y al mismo tiempo ser atractiva en términos electorales.

Porque sin votos será imposible pensar en un cambio de rumbo en 2019.