Leonardo Vera, jugador de Quilmes de Rafaela, le pegó en pleno partido y el juez debió ser retirado en ambulancia del estadio.
Quilmes y Sportivo disputaban una nueva edición del clásico regional, en Rafaela. El encuentro iba 0-0, pero sólo se llegó a los 42 minutos. En ese instante, el defensor local Leonardo Vera se dio cuenta de que sería expulsado por el árbitro, Silvio Ruiz, tras insultarlo. Su reacción fue dura: le pegó a puño cerrado en el rostro, lo que derivó en un gran tumulto.
El juez, luego de ser agredido, decidió resguardarse en el vestuario. Tras 20 minutos, y a pesar de que los jugadores no querían, decidió suspender el partido.
Además, para que la situación no pase a mayores, el agredido se fue del estadio dentro de una ambulancia.
El técnico de Sportivo, Juan Orellana, declaró: "Es preocupante que pasen estas cosas. Uno jugó al fútbol, tenés las pulsaciones a mil pero hay que tranquilizarse, no había motivos para que termine como terminó".