Una de las primeras expositoras fue Mara Ruiz Malec, Ministra de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, quien aportó su mirada sobre el rol de la política en una relación virtuosa para el futuro del trabajo, la producción, y el conocimiento. "Todo esto que está pasando tiene que servir para generar acuerdos y consensos. Hay política de macroeconomía donde será difícil ponerse de acuerdo entre sectores antagónicos pero otros donde sí se pueden construir consensos. Tenemos que potenciar nuestro entramado productivo y nuestra capacidad de generar valor", afirmó la integrante del Gabinete del Gobernador Axel Kicillof, en el comienzo de su exposición.
"Muchas veces la agenda de productividad viene a proponer políticas que en realidad tienden a mejorar la extracción de rentabilidad del sector empresarial por sobre el sector trabajador. Esto tiene que ver con poner a producir a los trabajadores más tiempo por menos salario. Tenemos que llegar a un acuerdo para llegar a producir con lo mismo más, y para que eso funcione tiene que estar en discusión que se hace con ese más", amplió Ruiz Malec, en una forma de interpelar y aportar nuevas recetas para el mundo laboral que se viene.
"Hay una falta muy grande de conocimiento sobre que herramientas se pueden incorporar. Muchas veces de los empresarios que piensan que es necesario incorporar un paquete muy grande de innovación tecnológica y que eso tiene un costo altísimo, cuando se pueden hacer mejoras parciales, algunas de no muy alto costo. Tenemos que generar una cultura de la modernización", finalizó la Ministra de la cartera laboral bonaerense.
Luego fue el turno de Marcelo Tribuj fundador y CEO de Truelogic y actual Presidente de la Unión Argentina de Jóvenes Empresarios. "Tenemos que trabajar en el cambio cultural empresario. Si queremos una Argentina mejor, debemos pararnos sobre cuatro pilares fundamentales. El primero es la honestidad y transparencia, valores indiscutibles en un país donde queremos criar a nuestros hijos. El segundo tiene que ver con la profesionalización de las empresas y los empresarios, donde mientras más chica es la empresas menos se cumple. No hay que olvidarse que las PyMES generan más del 60% del trabajo", afirmó.
"Desde Unaje siempre incentivamos a nuestros socios a profesionalizarse. La tercera tiene que ver con la visión global. Argentina no es una isla remota, somos un jugador global y solo nos puede ir bien si nos vemos como parte del mundo. Debemos entender que no podemos limitarnos para hacer negocios desde Argentina. Por último, el impacto social es esencial, que la nueva generación empresaria vea como se convierte en un agente de transformación en la comunidad en la que se desarrolla. Tenemos un amor por nuestro país y queremos que nos vaya bien a todos. De a poco queremos ayudar a los empresarios a convencerse de estos valores, al margen de generar valor, ganar dinero y poder crecer a largo plazo",expuso Tribuj en la cumbre vía zoom.
A continuación, para aportar otra pata a la mesa, fue el turno de el sindicalismo como motor de la creación de empleo y Sebastián Maturano, Miembro del consejo directivo del sindicato La Fraternidad y Secretario general de la Juventud Sindical Peronista de la CGT. "Hemos refundado a mediados del año pasado la Juventud Sindical. Veníamos de cuatro años de pasarla mal y ahora nos toca la pandemia. Nos juntó la crisis para conformar UNAJE y debemos empezar a generar el diálogo social, dejando de lado el individualismo para trabajar por el conjunto de la sociedad. Necesitamos la generación de empleo y exportar valor agregado. Porque no podemos ser capaces a través de la generación de conocimiento la finanzas, el comercio exterior y los servicios públicos. Desde esa óptica vemos el desarrollo que queremos para nuestro país", afirmó Maturano.
"Esta generación debe tener el compromiso y la obligación de pasar las barreras de la representatividad e ir hacia el interés común. A empresas que puedan exportar valor agregado y dar empleo de calidad. Así podremos construir el país que todos soñamos", finalizó el joven sindicalista, con un mensaje de compromiso y idealismo para encarar el futuro.
Luego fue Pablo Escontrela, empresario Tech y vicepresidente comercial de Fremoni e integrante de la comisión directiva de UNAJE, quien aportó su concepto de cómo federalizar la economía del conocimiento. "Cómo santiagueño puedo contarles lo que significa emprender y comenzar con una empresa en la Argentina. La realidad es muy difícil generar todo tipo de emprendimiento. Debemos plantearnos un país donde buscar puntos en común. Desde el Interior hay una falta de oportunidades enorme, por falta de distancia y por eso que todo se centraliza en Buenos Aires. Desde la economía del conocimiento eso está demostrado que se puede generar valor desde otras zonas de nuestro país. Tenemos que ver a Argentina como un gran país, con distintas culturales pero integrarnos en una sola idea, respetándonos pero trabajando por el bien común".
Santiago Piccone, Coordinador de Juventud de la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) y sindicalista del sector del empleo público también aportó su mirada sobre el complejo escenario que viene. "Los trabajadores entendemos que el empleo debe ser un interés básico humano. No sólo de un sector sino nacional. El desafío es trabajar y dialogar desde el interés del sector al que representamos. La creación del empleo pospandemia viene de la mano del diálogo social", afirmó y aportó su mirada sobre el futuro que se acerca en el país, ante un escenario complejo donde el gran ganador es el capitalismo financiero".
LA SOLIDARIDAD, EL PRIMER MOJÓN DE UN LARGO CAMINO
El 12 de marzo, una semana antes del inicio de la cuarentena, Unaje (la Unión de jóvenes empresarios que cuenta con 400 socios en todo el país) y la Juventud Sindical, organizaron de manera conjunta la llegada del llamado Tren solidario a Santiago del Estero.
Esa fue una de las primeras tareas conjuntas concretas que la nueva generación de jóvenes empresarios y sindicalistas emprendieron de manera conjunta, como parte de un novedoso esquema de vinculación asociada para buscar consensos entre los dos sectores que contribuyen a articular el mundo del trabajo.
La formación partió en una nueva misión solidaria hacia la ciudad de La Banda, provincia de Santiago del Estero y todo lo recaudado fue entregado a los merenderos Manos Solidarias, Ángeles del Paraíso, y Los Álamos, que cuentan con 650 niños a los cuales se le provee de alimentación y apoyo escolar.
Desde abril de 2001, el Tren Solidario recorre el país "promoviendo a través de la Solidaridad el uso del transporte ferroviario", agregaron. Hasta el momento se realizaron 41 viajes, recorriendo unos 24.530 kilómetros y llevando más de 685.340 kilos de ropa y alimentos a pueblitos donde hace más de dos décadas que no llegan los trenes de pasajeros. Las organizaciones que colaboran con el Tren Solidario recolectan donaciones de alimentos no perecederos, ropa para niños, útiles escolares y calzado, que luego son recibidos con una sonrisa por cientos de niños y adultos en Santiago de Estero.
Todo ese esfuerzo siempre está supervisado por las autoridades santiagueñas, quienes tienen el pulso de poder distribuirlo entre los hogares más necesitados.