El cuerpo del empresario encontrado muerto en un country no podrá ser cremado por ahora
El gastronómico Rodrigo Emilio Fernández Martínez apareció en su cama con una bala en la cabeza la semana pasada. No había signos de violencia en su casa. El fiscal del caso ordenó varias pericias
El 19 de septiembre pasado, el empresario gastronómico Rodrigo Emiliano Fernández Martínez fue encontrado muerto con una bala en la cabeza en su casa del country Los Pingüinos de Ituzaingó. Tenía una pistola Rubí calibre .32 a su lado.
La empleada doméstica de Fernández Martínez (46) declaró como testigo ante la Policía Bonaerense y los peritos comprobaron que no había signos de violencia en el lugar, puertas o ventanas rotas en un country con amplias medidas de seguridad.
Tampoco hay una explicación para su muerte. Su familia no pudo ensayar un porqué ante el fiscal Marcelo Tavolaro, a cargo de dilucidar su fallecimiento. ¿Se suicidó por deudas, empresas en quiebra? Fernández Martínez, miembro de los directorios de varias empresas del rubro, no presenta rojos en su información financiera, no muestra aportes impagos o cheques sin fondo, los clásicos de todo empresario cuando empieza a quebrar. El hombre de negocios tampoco dejó una carta, un mensaje final.
El cuerpo, informan fuentes de la investigación a Infobae, ya fue entregado a la familia y llevado en un cementerio. Sin embargo, no podrá ser cremado hasta que la investigación de Tavolaro concluya. A pesar de la falta de signos de un posible asesinato, el fiscal tratará la muerte -adelantada por C5N- como un homicidio hasta cerrar el caso, con una amplia batería de estudios ordenados.
Tavolaro aguarda no solo los resultados de la autopsia al cuerpo de Fernández Martínez: también ordenó estudios toxicológicos y anatomopatológicos para determinar presencia de sustancias y lesiones, así como el barrido electrónico del hisopado de sus manos en busca de rastros de pólvora.
Fuente: Infobae