Entrevista exclusiva 24CON
Cumbio: "Ser flogger ya fue"
Agustina Vivero dice que se pasó a los "turros" de los shopping, habla de sexo y recuerda su vida mediática, ¿Por qué dejó de estudiar periodismo?
Hace tres años, no había día que los medios no hablaran de ella. Fue a cuanto programa de televisión existía, se convirtió en tema de debate nacional, le dedicaron un artículo en el diario New York Times y hasta le ofrecieron ser diputada. Todos estaban maravillados con Cumbio – pocos sabían que su verdadero nombre es Agustina Vivero -, la adolescente que a los 16 años era líder de la tribu urbana del momento y se declaraba abiertamente bisexual.
Pero una vez más quedó demostrada la teoría de los 15 minutos de fama, y la fascinación por los llamados Floggers se desvaneció tan rápido como el boom de la lambada o el Tamagotchi. Con casi 20 años, Agustina es ahora lo más parecido a una joven normal, aunque le debe a sus épocas mediáticas el haber participado como entrevistadora en el programa “Vértigo en el aire”, junto a Matías Martin y Maju Lozano – todavía no sabe si estará en la segunda temporada –, y también el tener una película propia: el documental “Soi Cumbio”, de Andrea Yanino, que el mes que viene será parte del Bafici.
“La directora quería filmar la vida de una adolescente y la conocí en el Abasto. Estaba con una amiga mía y me acerqué porque creí que era su mamá. Empezamos a hablar y le interesó grabarme, porque vio todo lo que me estaba pasando. A partir de ahí empezaron a salir las notas y todas las cosas que hice. Filmó todo el proceso, desde antes que me hiciera conocida hasta fines del año pasado”, cuenta a 24CON Cumbio, que después de pasar por un look rubio volvió a su color natural de pelo, aunque ahora lo usa más corto.
Sin embargo, su grupo de pertenencia no logró trascender como ella y hoy es casi una especie en extinción que, según su líder, va mutando para no desaparecer. “Ya casi no hay Floggers con chupines de colores y el flequillo para el costado. Pasó la moda. En cambio, el año pasado fue la época de los cortes casquito y la ropa deportiva. A los cumbieros se les decía Los Turros: los Abasturros se juntaban en el Abasto, los Sanjusturros en el shopping de San Justo y los Uniturros en el Unicenter”, revela.
Además, el paso del tiempo se hizo notar. “Los chicos van creciendo. Para mí no es lo mismo estar con mis amigos ahora que tengo que ir a la facultad, que antes, cuando estaba en el secundario y no hacía nada”, justifica, y aclara que, aún así, “nos seguimos reuniendo en el Abasto los domingos, como hace ya tres años. A estos encuentros ya no la acompaña Marulina: cortó la relación hace bastante y ahora no tiene novia.
Manteniéndose fiel al perfil de chica 2.0 que la hizo famosa, Agustina todavía actualiza su Fotolog todos los días. “Hace poco dijeron que estaba presa por robo. Ni ahí. ¿Dónde voy a estar presa? ¿En una cárcel con Wi-Fi?”, bromea.
¿Seguís estudiando periodismo?
Estuve dos años en TEA pero no me convencía, así que dejé y este año me inscribí en la Universidad de Palermo para estudiar Ciencias de la Comunicación. Me parece importante tener un título universitario. Arranco el lunes, esperemos que me vaya bien. El secundario ya fue, a la universidad se va a estudiar.
¿Crees que con tu trabajo en “Vértigo” mostraste otra faceta tuya?
El programa me gustó mucho. Muchísima gente a la que quizás no le caía bien, le empecé a caer bien por las notas, que tenían que ver conmigo. En la mayoría de las notas salían amigos míos, chicos con los que me relacionaba todo el tiempo. La pasé muy bien.
Ahora elijo un poco más las notas que hago. Quiero enfocarme un poco en estudiar y en ver qué va pasando, si hay alguna propuesta que me interese. Hice un piloto con el INADI para La TV Pública, en contra de la discriminación. Hay que ver cómo se van dando las cosas.
¿Por qué te parece que en su momento los noticieros le dieron tanta importancia a las tribus urbanas?
Se dio por un montón de cosas. Sobre todo por Internet, porque recién se descubría la masividad que tenía y cómo usarlo como un medio de comunicación y convocatoria. También les interesaba la ambigüedad sexual de algunas tribus y sus ideologías, aunque los Floggers no teníamos ninguna.
¿Nunca te sentiste usada por los programas de televisión que hacían rating hablando mal de tu grupo?
No, no tengo rencor con nada. Todas las cosas que hice, fueron porque yo las quise hacer. Creo que las dos partes se divertían. Si no, no hubiera ido cuando me llamaban. A todo se le busca la “pica” como para poder hablar de algo. No me molesta, la tele es así.
¿Te gusta ver los reality shows que hay este año?
En verano vi muy poca tele, pero me gusta “El réferi del matrimonio” y me divierte mucho “Gran Hermano”. La gente se divierte con los realities y está bien. Sienten que participan, todo el tiempo están comentando lo que pasa. Incluso para criticar al programa o al jugador, están participando igual.
¿Entrarías a un reality si te lo propusieran?
Tendría que pensarlo, porque soy muy dependiente de mi familia y de mis amigos. Pero no estoy en contra ni ahí, por algo lo ve todo el mundo.
Además de Fotolog, ¿ahora usás otras redes sociales?
Tengo Facebook, que me lo cierran a cada rato pensando que no soy yo. Y también tengo el Twitter @soycumbio, pero la verdad no me gusta, no lo uso mucho.
¿Te arrepentís de haber hablado abiertamente de tu sexualidad?
No, no tengo problema en hablar de mi vida privada. Tenía novia y me encantaba decirlo en la tele con 16 años. Por supuesto que hay cosas que me las guardo porque son personales, pero no me parece que tenga nada de malo hablar de eso, al contrario. Ayudó a muchos chicos que no se animaban a decirlo.
¿Qué opinás sobre la Ley de Matrimonio Igualitario?
No me pongo de ningún lado de la política, pero la verdad es que tengo que felicitar a la presidenta, porque no para de hablar del tema. Con otros presidentes no se hubiera podido lograr la Ley. No entiendo que haya políticos que todavía no lo apoyan. También me parece muy bueno que se quiera cambiar la ley de adopción, para que no se haga tan complicado adoptar.
¿Te gustaría especializarte en periodismo político?
Con la política traté de nunca relacionarme. Cuando me ofrecieron ser diputada dije que no, porque no tenía nada que ver conmigo. Me gusta más el periodismo en general, el tema de las nuevas generaciones y las nuevas formas de comunicación. Me interesa muchísimo más porque tengo mucho que ver con eso.
“La directora quería filmar la vida de una adolescente y la conocí en el Abasto. Estaba con una amiga mía y me acerqué porque creí que era su mamá. Empezamos a hablar y le interesó grabarme, porque vio todo lo que me estaba pasando. A partir de ahí empezaron a salir las notas y todas las cosas que hice. Filmó todo el proceso, desde antes que me hiciera conocida hasta fines del año pasado”, cuenta a 24CON Cumbio, que después de pasar por un look rubio volvió a su color natural de pelo, aunque ahora lo usa más corto.
Sin embargo, su grupo de pertenencia no logró trascender como ella y hoy es casi una especie en extinción que, según su líder, va mutando para no desaparecer. “Ya casi no hay Floggers con chupines de colores y el flequillo para el costado. Pasó la moda. En cambio, el año pasado fue la época de los cortes casquito y la ropa deportiva. A los cumbieros se les decía Los Turros: los Abasturros se juntaban en el Abasto, los Sanjusturros en el shopping de San Justo y los Uniturros en el Unicenter”, revela.
Además, el paso del tiempo se hizo notar. “Los chicos van creciendo. Para mí no es lo mismo estar con mis amigos ahora que tengo que ir a la facultad, que antes, cuando estaba en el secundario y no hacía nada”, justifica, y aclara que, aún así, “nos seguimos reuniendo en el Abasto los domingos, como hace ya tres años. A estos encuentros ya no la acompaña Marulina: cortó la relación hace bastante y ahora no tiene novia.
Manteniéndose fiel al perfil de chica 2.0 que la hizo famosa, Agustina todavía actualiza su Fotolog todos los días. “Hace poco dijeron que estaba presa por robo. Ni ahí. ¿Dónde voy a estar presa? ¿En una cárcel con Wi-Fi?”, bromea.
¿Seguís estudiando periodismo?
Estuve dos años en TEA pero no me convencía, así que dejé y este año me inscribí en la Universidad de Palermo para estudiar Ciencias de la Comunicación. Me parece importante tener un título universitario. Arranco el lunes, esperemos que me vaya bien. El secundario ya fue, a la universidad se va a estudiar.
¿Crees que con tu trabajo en “Vértigo” mostraste otra faceta tuya?
El programa me gustó mucho. Muchísima gente a la que quizás no le caía bien, le empecé a caer bien por las notas, que tenían que ver conmigo. En la mayoría de las notas salían amigos míos, chicos con los que me relacionaba todo el tiempo. La pasé muy bien.
¿Cómo vivís esta etapa alejada de los medios?
Ahora elijo un poco más las notas que hago. Quiero enfocarme un poco en estudiar y en ver qué va pasando, si hay alguna propuesta que me interese. Hice un piloto con el INADI para La TV Pública, en contra de la discriminación. Hay que ver cómo se van dando las cosas.
¿Por qué te parece que en su momento los noticieros le dieron tanta importancia a las tribus urbanas?
Se dio por un montón de cosas. Sobre todo por Internet, porque recién se descubría la masividad que tenía y cómo usarlo como un medio de comunicación y convocatoria. También les interesaba la ambigüedad sexual de algunas tribus y sus ideologías, aunque los Floggers no teníamos ninguna.
¿Nunca te sentiste usada por los programas de televisión que hacían rating hablando mal de tu grupo?
No, no tengo rencor con nada. Todas las cosas que hice, fueron porque yo las quise hacer. Creo que las dos partes se divertían. Si no, no hubiera ido cuando me llamaban. A todo se le busca la “pica” como para poder hablar de algo. No me molesta, la tele es así.
¿Te gusta ver los reality shows que hay este año?
En verano vi muy poca tele, pero me gusta “El réferi del matrimonio” y me divierte mucho “Gran Hermano”. La gente se divierte con los realities y está bien. Sienten que participan, todo el tiempo están comentando lo que pasa. Incluso para criticar al programa o al jugador, están participando igual.
¿Entrarías a un reality si te lo propusieran?
Tendría que pensarlo, porque soy muy dependiente de mi familia y de mis amigos. Pero no estoy en contra ni ahí, por algo lo ve todo el mundo.
Además de Fotolog, ¿ahora usás otras redes sociales?
Tengo Facebook, que me lo cierran a cada rato pensando que no soy yo. Y también tengo el Twitter @soycumbio, pero la verdad no me gusta, no lo uso mucho.
¿Te arrepentís de haber hablado abiertamente de tu sexualidad?
No, no tengo problema en hablar de mi vida privada. Tenía novia y me encantaba decirlo en la tele con 16 años. Por supuesto que hay cosas que me las guardo porque son personales, pero no me parece que tenga nada de malo hablar de eso, al contrario. Ayudó a muchos chicos que no se animaban a decirlo.
¿Qué opinás sobre la Ley de Matrimonio Igualitario?
No me pongo de ningún lado de la política, pero la verdad es que tengo que felicitar a la presidenta, porque no para de hablar del tema. Con otros presidentes no se hubiera podido lograr la Ley. No entiendo que haya políticos que todavía no lo apoyan. También me parece muy bueno que se quiera cambiar la ley de adopción, para que no se haga tan complicado adoptar.
¿Te gustaría especializarte en periodismo político?
Con la política traté de nunca relacionarme. Cuando me ofrecieron ser diputada dije que no, porque no tenía nada que ver conmigo. Me gusta más el periodismo en general, el tema de las nuevas generaciones y las nuevas formas de comunicación. Me interesa muchísimo más porque tengo mucho que ver con eso.
17 de marzo de 2011
Cumbio: "Es difícil estar en mis zapatos"
Fue contratada por marcas multimillonarias, hace teatro, va de gira por boliches, escribirá un libro y quiere ser periodista. Cumbio habló con 24CON de su sexualidad y dijo que los floggers "son sólo una moda".
Génesis de una flogger star
La Cumbiofest, las primeras reuniones en Abasto, el nacimiento espontáneo de la comunidad flogger y su esparcimiento en los adolescentes de todo el país. ¿Cómo fue el inicio de Cumbio? ¿De qué se trata el fenómeno?