Habían pasado las 19 y el calor era sofocante. En eso, quienes viajaban en el último de los vagones, fueron sorprendidos por una formación de la línea Ferrobaires que se dirigía a la ciudad de Junín, también llena de pasajeros.
Su velocidad y peso le impidió frenar con tiempo, por lo que la locomotora de este se subió encima del furgón dejando al menos cuatro muertos, más de 40 heridos graves y 15 con posibilidad de perder la vida.
24CON, uno de los primeros medios en llegar al lugar, dialogó con un investigador experto de la CNRT (Control Nacional de Regulación de Transporte), quien le confirmó haber encontrado una huella de frenada de unos 25 metros de largo, insuficiente para que la máquina principal de la unidad de Ferrobaires se detuviera.
Según las primeras hipótesis que informó en exclusivo, sostuvo que todo podría haber ocurrido por una mala información sobre las vías. Al maquinista le habrían informado erróneamente que la vía estaba libre, razón por la cual no detuvo su marcha. A eso hay que sumarle que tenía en sol de frente y que salía de una curva. Se habría encontrado sorpresivamente con la formación del San Martín, lo que desencadenó la tragedia.