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El volante argentino del Real Madrid Angel Di María aclaró que "no fue un gesto hacia nadie" y que solamente se "acomodó" el pantalón, luego de tocarse los testículos al ser reemplazado por el galés Gareth Bale en la victoria de su equipo ante Celta de Vigo, por 3 a 0, por la fecha 18 de la Liga Española de fútbol.
"No fue un gesto hacia nadie. Me acomodé y seguí corriendo. Acá empezaron con que sonreía. Si estuviera caliente no habría saludado a nadie. Salí con total naturalidad. Siempre esperan que yo haga algo", sostuvo el jugador rosarino, en diálogo con Fox Sports.
Luego el ex mediocampista de Rosario Central subrayó: "Siempre tengo que estar aclarando lo que hago. Con el resto no pasa nada y conmigo se arma un quilombo bárbaro".
"Nunca tuve problemas con la gente. Sentí que la mitad aplaudía y la mitad chiflaba. No tengo problemas con (Carlo) Ancelotti", dijo el jugador, en referencia a la relación que mantiene con el técnico italiano de la entidad `merengue`.
"Siento que están esperando algo para revolucionar todo", se quejó el volante rosarino.
Di María advirtió: "Arranqué muy bien la temporada. Es normal que un jugador que vale 100 millones venga para jugar (dijo en referencia al galés Bale)".
Después, el volante del seleccionado argentino reconoció: "Soy feliz en (Real) Madrid, estaba mirando para abajo y me estaba acomodando".
"Me gustaría volver a Rosario Central estando en buen nivel. Tengo contrato con el Madrid hasta 2018. Pero me gustaría volver como Maxi (Rodríguez) a Newell´s y ganar algo como lo hizo él", se ilusionó de cara al futuro.
6 de enero de 2014
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