Lehman Brothers perdió 3.900 millones de dólares en el tercer trimestre del ejercicio en curso, después de verse obligado a importantes depreciaciones de activos de su cartera de créditos inmobiliarios. En un año, el valor de sus acciones se vio dividido por más de 16 y el viernes cerró a 3,65 dólares por acción. Su capitalización bursátil perdió 2.490 millones de dólares.
Esta declaración de bancarrota es la consecuencia de la imposibilidad del Banco de encontrar un comprador, tras la retirada el domingo del último interesado, el banco británico Barclays. En Argentina, la falta de crédito internacional creó una suerte de protección frente a esta crisis aunque no descartan la posibilidad de aumentos en los intereses, pero desde el Gobierno anunciaron que el dólar se mantendrá estable.
El diputado nacional por el bloque Buenos Aires para Todos Proyecto Sur y economista, Claudio Lozano, confirmó a 24CON que la crisis “indudablemente va a impactar en nuestra economía”, ya que Argentina le compra a países como “China o India que recibirán este golpe bursátil”.
“Si bien hemos crecido a nivel industrial, no dimos pasos grandes en términos de recuperar la capacidad de producción”, esto provocaría que tarde o temprano las compras de maquinarias a mercados internacionales provoquen un déficit en la economía nacional.