Escalofriantes cárceles que ahora son hoteles de lujo
¿Te animás a dormir en el mismo lugar que sirvió para privar de la libertad a otra persona?
¿Podrías dormir en el mismo lugar que sirvió para privar de la libertad a alguien? Si sos aventurero y te gusta conocer toda clase de historias, existen al menos diez hoteles donde ese extraño anhelo puede convertirse en realidad.
Se trata de una serie de prisiones que pasaron de ser espacios de encierro, tortura y criminalidad, a terrenos de relax y buen vivir.
Camp Bucca. Antigua prisión iraquí, conocida como 'Guantánamo de Irak'. Comprada por un grupo empresarial que busca darle nuevo uso a las instalaciones abandonadas de la guerra, pero no hubo mucha remodelación, las habitaciones están en hileras entre barrotes.
Het Arresthuis. Ubicada en Holanda, la cárcel abrió sus puertas en 1862. Los lugareños la conocían como la prisión de los sufridores. En 2007 cerró permanentemente hasta reabrir como hotel. La estructura se mantiene igual, no se ha querido olvidar la historia del edificio.
Hotel Malmaison. Hasta el año 1996 funcionaba como prisión en el Reino Unido. Su reciente historia carcelaria se nota en la estructura y en las grandes puertas de metal que se han conservado. Eso sí, dentro de las habitaciones ya hay comodidades.
The Liberty Hotel. Fue la cárcel Charles Street de la ciudad de Boston, EU. Se construyó en 1848 y lo que antes eran celdas con barrotes, hoy se han convertido en 300 habitaciones y 10 suites con vista al río Charles. Abrió en 2007 y su bar Clink es una visita obligada.
Hostal Celica. Esta prisión de Eslovenia terminó como un hostal, así que ofrece catre y reja. Una de las antiguas celdas se ha convertido en "la sala de confinamiento", un lugar de relax, silencio, meditación y contemplación con altares de las cinco grandes religiones.
Courthouse Hotel. Es una antigua corte de Inglaterra con celdas provisionales que se hizo famosa por anécdotas como que en 1970 Mick Jagger fue acusado por posesión de cannabis, o que ahí se desarrolló el caso “Queensbury” de Oscar Wilde.
Four Seasons Istanbul Sultana met. Fue la primera cárcel de la capital turca, Estambul; aunque no queda nada de aquel lugar, más que las cuatro paredes que le rodean; de hecho, la solera de este edificio de principios del siglo XIX se compensa con todo tipo de comodidades.
Clink87. Hostal situado en Londres, en las instalaciones de cortes de 200 años de antigüedad, que gozan de arquitectura victoriana. Hoy todavía se mantiene la estructura de la sala principal, ahora reconvertida en sala de ordenadores.
Hotel Katajanokka. En Helsinki. Nace como prisión en 1832 bajo el mandato ruso que, al ganar la guerra contra Suecia en 1809, decide modernizar las fórmulas carcelarias del norte y, para ello, pone de ejemplo esta cárcel. Todavía se conserva la iglesia.
Hi-Ottawa Jail. Hostal en un edificio de 150 años, la antigua cárcel Carleton County Gaol, en Canadá. Las paredes, de piedra y ladrillo, te pondrán a tono.
2 de agosto de 2013