Para pasar el calor, la gente se baña entre la basura

Las imágenes lo dicen todo. Los vecinos que no pueden viajar para disfrutar de vacaciones, ni ir a una pileta para soportar el intenso calor, deben bañarse en aguas contaminadas y llenas de basura. Así está hoy en día la Ribera de Quilmes, que además de presentar un aspecto desagradable para la vista se convirtió en un foco infeccioso y peligroso.

Cientos de botellas, papeles y residuos de todo tipo flotan en la orilla mientras las personas se bañan, según revelan las fotos publicadas por Agencia El Vigia. La Ribera cuenta, además, con sólo dos baños que no tienen agua. Los puestos de venta, que deben pagar mensualmente a la municipalidad para tener su lugar, no tienen gas ni agua potable, y deben preparar sus comidas con garrafas. El único punto positivo del lugar, aseguran, es la pequeña lancha con dos guardavidas que recorre la zona a toda hora.

Opciones para pasar las vacaciones en el Conurbano –ACÁ-

“El estado de la ribera causa indignación, pero tiene que ver con la desidia que tiene el gobierno local. Lo que pasa en el río pasa en todo el distrito, se ve basura en todos lados. El principal caballito de batalla del Intendente (Francisco Gutiérrez) durante su campaña fue que Quilmes debía crecer de cara al río. Las fotos son más que elocuentes. Quiso darle una fachada de crecimiento con el emprendimiento Techint, quitando la selva marginal, y fracasó. Eso era para darle una fachada de crecimiento que iba a servir para algunos pocos y nos iban a destruir la selva”, contó a 24CON el concejal del Frente Amplio Progresista Mario Sahagún.

Espinoza quiere que Catán sea el basural del país ACÁ

Para el edil, el mal estado de la ribera es de vieja data. “Hace mucho tiempo. Esto lleva muchos años de mala gestión. Cuando todos los cargos políticos son por compromisos, termina en esto. Gente que no sabe cómo gestionar y que busca la posibilidad de que funcione una municipalidad paralela. Se preocupan en llevar dinero para sus bolsillos”, sostuvo Sahagún, quien agregó: “La gente pobre es la que tiene que ir al río a pasar el verano, a pasar sus 'vacaciones', para refrescarse un poco. Y en el río se encuentra con un basural a la orilla. Corre riesgo de contraer enfermedades porque nuestro río está contaminado y no hay ningún tipo de trabajo para sanearlo. Es un ataque contra los vecinos que menos tienen y tienen que encontrarse con ese foco infeccioso y el gobierno municipal se hace el distraído”.

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15 de enero de 2013