Mató a su esposa por infiel y pide cuidar a su madre

Un hombre que en marzo de 2008 fue condenado a 22 años de prisión por asesinar a su esposa infiel, pidió seguir cumpliendo pena pero bajo la figura de arresto domiciliario y el fiscal se opuso a la petición, confirmaron fuentes judiciales a Online-911.

Leonardo Rafael Crespo hoy se presentó ante dos de los jueces que lo condenaron (la tercera integrante del Tribunal está jubilada) e imploró que como su condena no está firme y su madre está “muy enferma”, lo dejen seguir esperando la confirmación o rechazo de la sentencia, pero en su casa de la localidad de Gonnet, donde fue asesinada su esposa Alejandra Escamochero.

El crimen ocurrió el sábado 5 de marzo de 2005 en el chalet que el matrimonio compartía en 24 entre 493 y 495 de Gonnet. Según acreditó la justicia platense, en primera instancia, Crespo, cansado de las infidelidades y el maltrato de su esposa, la golpeó sorpresivamente para luego ahogarla en una Pelopincho en la que la mujer habitualmente tomaba sol. Horas más tarde llamó a la policía intentando simular que a su mujer la mataron en represalia por presuntas deudas.

Crespo estuvo dos meses prófugos y fue descubierto en la provincia de Córdoba donde vivía junto a una joven que se presume era su novia en ese momento. El acusado insiste que al momento del crimen, él no estaba en su casa y se ubica en el club Círculo Policial de La Plata, jugando pelota paleta.

En el juicio oral el fiscal había perpetua al acusarlo por el delito de homicidio calificado por el vínculo y alevosía (aprovecharse del estado de indefensión de la víctima). La defensa solicitó la absolución y, como planteo subsidiario (secundario) se aplique la figura de circunstancias excepcionales de atenuación de la pena. El abogado Ricardo Bianchi solicitó que se tenga en cuentan "la degradación del matrimonio producto de las infidelidades de Analía Escamochero, hecho que llevó a que Crespo intentara tomar venganza".

Por mayoría, dos de los jueces hicieron lugar a la petición alternativa de la defensa y aplicó una pena de 22 años de cárcel, sentencia confirmada por Casación bonaerense y la Suprema Corte provincial, aunque sus nuevos defensor, apelaron via recurso Federal para que el caso llegue a la Corte de nación, instancia que es analizada por la cúpula de la justicia ordinaria provincial.

26 de diciembre de 2012