Militares "coparon" dos peligrosas favelas de Río
Entraron con el apoyo de tanques y helicópteros. Quieren controlar "crackolandia", un refugio narco.
Unos 2.000 militares y policías brasileños ocuparon hoy con vehículos blindados y el apoyo de helicópteros las favelas de Manguinhos y Jacarezinho, en la zona norte de Rio de Janeiro, en el marco de las acciones para el control de territorio en la lucha contra el narcotráfico.
El gobierno del Estado de Rio de Janeiro informó mediante la Secretaría de Seguridad Pública que la ocupación duró 20 minutos y no hubo enfrentamiento con grupos de narcotraficantes.
El objetivo es instalar en las dos favelas ubicadas cerca de la Avenida Brasil, uno de los principales accesos a la ciudad, la 29a. Unidad de Policía Pacificadora (UPP), que ya están actuando en las principales favelas de la "ciudad maravillosa" en el marco de las acciones contra el narcotráfico.
El tema de la salud pública fue uno de los focos de la operación, ya que entre las favelas, sobre las líneas del ferrocarril, existe una llamada "crackolandia": 107 usuarios de crack, 15 de ellos niños, fueron llevados a centros de atención médica. El crack fue introducido en los años 90 en Rio de Janeiro por Fernandinho Beira Mar, el mayor narco brasileño que está en prisión y es el comandante del "Comando Vermelho", comando rojo, principal banda de narcos cariocas.
La operación contó con el apoyo de 13 tanques de la Marina que destruyeron las barricadas dejadas por el narcotráfico en las favelas de Jacarezinho, Manguinos y en las vecinas de Mandela y Varginha, donde viven unas 70 mil personas. Los jefes del narcotráfico en las favelas ocupadas huyeron hace algunos días hacia otras comunidades, en los suburbios.
Según el gobierno, cinco sospechosos de comandar el narcotráfico en Jacarezinho murieron en un tiroteo con la policía en una favela cercana llamada Juramento, adonde se habían ido a refugiar.
14 de octubre de 2012
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