Denuncia hospital dejó morir a su hijo
Es la madre del joven asesinado a golpes por una patota. "Estuvo 12 horas atado y sin ayuda", dijo.
La justicia deberá investigar el accionar de los médicos y enfermeros de la guardia del Hospital Isidoro Iriarte de Quilmes a partir de la denuncia presentada por la madre de Brian Marcelo Garberoglio, un joven que recibió una paliza a la salida del boliche “punto límite”, en donde asegura que el joven estuvo 12 horas tirado en un rincón, atado y sin recibir la atención indicada.
Según publica el Diario 5 Dias de ese distrito del sur del Conurbano, la mamá del menor asesinado, Graciela Quinteros, presentó la denuncia el 1º de junio último en la Fiscalía de Instrucción y Juicio Nº9, a cargo de la fiscal Claudia Vara, porque consideró que su hijo no recibió los cuidados intensivos que ameritaban las heridas con las que llegó al nosocomio local.
La señora Quinteros aseguró a ese medio que durante las 12 horas que su hijo permaneció en el hospital, siempre estuvo en la guardia de emergencias y en ningún momento lo derivaron a terapia intensiva. Dijo que lo mantenían atado y que a ella no la dejaban ingresar para estar a su lado.
Quinteros destacó la atención que le dispensaron a su hijo, doce horas después, cuando logró trasladarlo a un sanatorio privado de la zona, donde inmediatamente lo internaron en terapia intensiva, le colocaron un cuello ortopédico y le realizaron numerosas curaciones. No obstante, el esfuerzo médico no fue suficiente para salvarle la vida.
18 de junio de 2012