¿Qué hacían los famosos cuando estalló el país?

Alejandro Fiore:
En ese momento estaba produciendo Los Simuladores, habíamos hecho un arreglo para empezar a filmar y viajábamos con los chicos de Los Simuladores para filmar un capítulo y sucede esto. Suspender el viaje era no empezar el programa. Lo afrontamos con mucho esfuerzo y con nuestras tarjetas de crédito para pagar los gastos. No podíamos postergarlo porque si no, no empezábamos. Los contratos habían perdido su vigencia. Después, el canal debería darnos la plata. Fuimos como muy incoscientes: nos íbamos a Punta del Este con cuarenta personas. En cuanto a lo económico, con la primera temporada de Los Simuladores salimos empatados, por eso cuando terminamos de grabar inmediatamente todos tuvimos que seguir trabajando.

Arturo Puig:
Justamente venía escuchando la radio. Me acuerdo que estaba muy pendiente de la televisión, viendo lo que pasaba, un poco horrorizado con lo que estaba sucediendo en nuestro país, el derrumbe, de alguna manera. Vivo en el Bajo Belgrano y acá no hubo gran movimiento. Sí había cacerolazos esporádicos.
Un poco siento las frustraciones de nuestro país. Nunca me pude explicar qué pasó con De la Rúa, que se preparó todo el tiempo para ser presidente, y que cuando lo hizo fue un desastre. Las vicisitudes que siempre estamos viviendo, el otro día le comentaba a un amigo qué sensación sería vivir en un país en donde las cosas más o menos marchen y no haya tanto cambio, pero entiendo que si los hay, que sean para mejor.


Laura Azcurra

Empezábamos a grabar Son Amores en Polka. Vivía en Barrio Norte (en Austria y French), y recuerdo que toda la situación del cacerolazo era fuertísima. Viví esos días con muchísima tristeza, más allá que sentía que en ese reclamo popular y genuino había una luz de esperanza y deseo de cambio, eso me emocionó mucho. Pensaba que verdaderamente se iba a encontrar un camino diferente, como el pueblo despertaba de este letargo. Sentía que presenciaba una movida popular auténtica. Aunque me acuerdo que era una imagen apocalíptica, calles cortadas, incendiadas, esa sensación de fin de un ciclo, y también me daba miedo lo que se generaba desde los medios.

 

Carlos Belloso
Es algo gracioso, estaba viendo una película en casa y como hacía calor tenía prendido un ventilador. En un momento pensaba que estaba fallando porque hacía ruido. Traté de arreglarlo y no me di cuenta que lo que escuchaba venía de afuera, era un ruido muy fuerte. En ese momento prendí la televisión y vi que era en toda la Ciudad, algo muy impactante. Más allá de eso, en algunas manifestaciones he salido, he sido corrido por la Policía, y también participé de asambleas populares. Fue un desencadenamiento, sentía que tenía que ir, salir a la calle. Era uno de los que decía "que se vayan todos". Hoy lo veo muy lejos eso, tratando de entrar en una estabilidad, que la votación última apostó a eso, al crecimiento y a la estabilidad, la inflación y eso que está sucediendo lo frenan, pero apuesto a que se va a encontrar una solución.

Pablo Marcovsky
Estaba al aire haciendo 'Pulgas en el 7'. Me acuerdo que en un corte fueron con un flash informativo, y al regreso hice un comentario de lo que sucedìa y a alguien de las autoridades no le cayó muy bien, por lo que tuve una discusión muy fuerte. Yo hacía un programa para chicos, personalmente lo seguía atravesado por la misma angustia colectiva. El detonante fue cuando vi que le tiraban los caballos a las Madres, y la sensación fue de incertidumbre, bronca e impotencia. Nos acercamos a la Plaza y estaba muy bardo todo. Hubo mucha preocupación y angustia.

 

Federica Pais
Estaba grabando los típicos programas para fin de año. Estábamos encerrados, era como un tono festivo, y a la vez teníamos en todos los monitores lo que estaba sucediendo afuera, que generaba un contrasentido muy feo. Me acuerdo que seguí todo lo que pasaba por TV y tuvo angustia de la represión, que después se comprobó que causó una treintena de muertes. La gente salió con cacerolas y eso lo aplaudí en su momento.

 

 

 

 

Roberto Piazza
El día del caos estaba en mi casa trabajando. Lo que me acuerdo es que en Belgrano era un gran revuelo, tuve una angustia tremenda, venía de una situación de inestabilidad económica de hace años y me vino todo eso a la cabeza. Había un malestar terrible, una cosa espantosa. La pasé encerrado en mi casa. También recuerdo que salí a la terraza con una olla y la reventé a palos. En definitiva me quedé tratando de ver cómo seguía mi empresa, cuando muchos se fueron mal del país, a Estados Unidos y a Europa. Ese día me la pasé trabajando, la realidad es que es insólito, pasaraon 15 días, y vendí más ropa de alta costura a dólar, como si no hubiese pasado nada.

 

Nino Dolce

Fue una época inolvidable porque justo ese día me separé. Me acuerdo que estaba como encerrado, todo mal. Salí a correr a despejarme la cabeza y escucho el ruido. Y se vino ese bardo terrible. Estaba como súper aturdido porque me habían echado de mi casa, estaba con unos amigos que me habían dado refugio. Lo que pasaba en el país, que era terrible, quedaba en un segundo plano para mi. El tema del corralito no me afecto porque no tenía un mango, estaba más seco que una pasa de uva. Además inauguré un club del trueque en la feria de Mataderos y organicé una feria.

 

20 de diciembre de 2011