"Nos duele mucho", dijo el juez que liberó al violador asesino de La Pampa

Dictaron la prisión preventiva para el hombre que había violado a su novia y luego la apuñaló.

 

El juez Gustavo Jensen, del Tribunal de Impugnación Penal, señaló que "jamás" pensó en que la joven Carla Figueroa, de 19 años y con un hijo de tres, podía ser asesinada.

"Nos duele muchísimo. Era algo que jamás se nos ocurrió pensar  que podía ocurrir. La gente puede pensar que acá se estaba discutiendo la integridad física de la víctima, o que estuviera en riesgo de vida. Nunca se planteó", dijo el magistrado.

Carla Figueroa había firmado el "avenimiento", es decir, el perdón a su violador, y se había casado con él.

En tanto, fuentes judiciales informaron que Marcelo Tomaselli, de 26 años, no quiso responder a los interrogantes del fiscal de la causa, por consejo de su nuevo defensor oficial. Así, el juez Diego Ambrogetti ordenó la prisión preventiva para el acusado, quien ya se encontraba privado de la libertad luego del crimen.

 

Tomaselli se presentó a la audiencia donde se le leyeron los cargos en su contra. Además, el fiscal Alejandro Gilardenghi solicitó una serie de pericias médicas y psiquiátricas. El hombre está acusado de "homicidio calificado por el vínculo", delito que prevé una pena de prisión perpetua.

 

El magistrado ordenó además el cotejo de ADN entre la víctima y las manchas de sangre en la ropa del acusado, y las pericias en el teléfono celular que usaban él y ella en busca de llamadas y mensajes SMS.

 

En la sala estuvieron presentes familiares de la víctima, quienes, acompañados por el Movimiento por los Derechos de las Mujeres, convocaron a una marcha para el próximo sábado, a las 19 horas, en el mástil de la municipalidad, para pedir justicia.

 

Por otro lado, en un video, después del abuso, Carla contó que en otras oportunidades Tomaselli la había amenazado. "Yo había vuelto con él porque me decía que se iba a matar", había dicho en su momento ante las cámaras de un programa de televisión de La Pampa.

 

 

Libre y perdonado


Luego de la violación, cuatro jueces intervinientes no habían consentido el "avenimiento", pero dos de una instancia superior, del Tribunal de Impugnación, lo permitieron.

Con ese "perdón", Tomaselli salió en libertad y una semana después, en la madrugada del sábado 10, mató a Carla de 11 puñaladas delante del hijo de ambos y de su propia madre.

Gustavo Jensen, quien con su voto y el de Carlos Flores posibilitó el avenimiento, reconoció que no fue una decisión acertada, pero consideró que no es momento para "pedir la cabeza" de dos jueces.

"No fue acertado, sería necio decir lo contrario con la crónica de lo ocurrido. No sólo nos tenemos que preocupar por pedir la cabeza de dos jueces sino de crear las instituciones para quela Justicia pueda trabajar como corresponda", planteó.

"Cuando ocurren sucesos de esta naturaleza todos debemos hacer una autocrítica porque en el sistema algo falla. Los jueces somos humanos y nos equivocamos", expresó.

El juez insistió ahora, a diferencia de otros magistrados que intervinieron, en que no había elementos para presumir que Carla no decidía en libertad.

"El casamiento era válido, además. Él obtuvo autorización para salir de la cárcel al civil, hubo otras autorizaciones. De todo esto se encargó el tribunal de origen. Además la mujer era víctima, no tenía que pedir permiso. Era su decisión", sostuvo.

"La crónica es de lo que pasó. No es fácil decidir. A la luz del acontecimiento, sería necio decir que lo que decidimos fue acertado. No fue acertado. Para casos similares habría que prever que existan las instituciones eficientes para garantizar la integridad de las víctimas", dijo.

En tanto, el fiscal general de General Pico, Carlos Salinas, exigió la renuncia de Jensen y de Carlos Flores.

"Nunca se tendría que haber permitido ese acuerdo. Ya que el avenimiento es un caso excepcional, quiere decir que la regla es no al avenimiento –dijo–. Si tuvieran dignidad, los jueces Flores y Jensen, del TIP, deberían renunciar a sus cargos. Es una vergüenza lo que pasó".

En tanto, dos diputadas del oficialista PJ, Mariana Baudino y Carmen Bertone, dijeron que analizan la posibilidad de iniciarles un juicio político a los jueces que posibilitaron la liberación de Tomaselli.

Por su parte, mujeres de distintas organizaciones realizaron este mediodía una ruidosa manifestación en la Ciudad Judicial, para pedir que Jensen y Flores renuncien a sus cargos.

A su vez, Soledad Reynoso, una de las hermanas de la joven asesinada, pidió perpetua para el asesino. "No le deseo la muerte (a Marcelo Tomaselli), porque es el  padre de mi sobrino", expresó.

El "avenimiento", una figura penal de la provincia a la que apelaron los abogados de Tomaselli y Figueroa para lograr la libertad del primero, quien estaba detenido por el cargo de violación agravada, no había sido avalado por el tercer juez en discordia del tribunal, Pablo Balaguer, quien había sostenido que el fallo no garantizaba la integridad de la víctima.