Fueron a batir el Guinness y casi terminan todos presos
Motociclistas santiagueños buscaban formar la caravana más grande del mundo, pero la mayoría no tenía casco ni papeles
Miles de motociclistas de la capital de Santiago del Estero se reunieron en la tarde del domingo para tratar de alcanzar el récord Guinnes como la concentración y caravana de motos más grande del mundo. Sin embargo, la mayoría de los presentes no tenía casco ni los mínimos papeles reglamentarios para circular por lo que casi se convierte en la multa más numerosa de la historia.
A pesar de que fue un domingo y a la siesta, más de 6000 vehículos llegaron hasta la nueva costanera de la ciudad capital en respuesta a la convocatoria que planteaba alcanzar la procesión más numerosa de rodados de cualquier tipo y cilindrada.
Más allá de los 4500 infractores que no pudieron ser contabilizados, Santiago del Estero igualmente se hizo con el récord ya que actualmente no existe un registro similar en el libro Guinnes. Pero, una vez establecida esta marca, los organizadores prometieron superarla para el año próximo.
El recorrido comenzó un poco más tarde de lo planificado y contempló un viaje por diferentes calles de la ciudad, las cuales fueron especialmente cerradas y custodiadas por la policía.
Con la presencia de Víctor Manuel Tirador, veedor miembro de "Guinnes World récords", se procedió a certificar las 1500 planillas inscriptas, las cuales viajarán hasta la sede de los récords en Inglaterra para que se establezca la nueva marca.
20 de diciembre de 2010