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Su nombre es Milica Dabovic, tiene 28 años, mide 1,75 y es una de las jugadoras de básquet más reconocidas de su país. De hecho, es parte del seleccionado nacional. En fin, la joven, se vio moralmente obligada a despojarse de todas sus prendas de vestir y posar como "Dios la trajo al mundo" para la edición alemana de la revista FHM, tras haber perdido una apuesta con un amigo.
La consigna de la apuesta era la de mostrar todos los tatuajes que la bella basquetbolista tiene grabados en su hermoso cuerpo. Además, en la entrevista que hubo de por medio, Milica describió la importancia de los mismos: "Ellos representan la fuerza, amor y felicidad. El delfín representa la inteligencia y la bondad", detalla.
La deportista se desempeña en el circuito turco y juega para Besiktas, desde donde su belleza ha provocado revuelo e interés por todo el viejo continente. Tanto es así, que ya hay creados numerosos grupos de seguidores en la red social Facebook.