¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

La reforma política en el ojo del debate

Lunes, 02 de noviembre de 2009 a las 10:12
Por Alejandro Cancelare
El Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires se reunirá el jueves próximo en su sede de La Plata para unificar su posición con respecto de la reforma política impulsada por el gobierno nacional y proponer una para el ámbito bonaerense.

Al igual que lo que propone Néstor Kirchner para el debate nacional, las autoridades del peronismo provincial pretenden que la Legislatura inicie la discusión la semana próxima que el proyecto esté aprobado antes del recambio de ambas cámaras, donde el oficialismo perderá su holgada mayoría para pasar a depender de aliados circunstanciales en el tratamiento de temas cruciales.

Queda claro por las charlas realizadas entre los principales referentes bonaerenses que en su trabajo no incorporarán la idea que en su momento propuso Florencio Randazzo, actual ministro del Interior cuando era funcionario de Felipe Solá. En aquel entonces  “el flaco” pretendía imponer el voto electrónico y la boleta única, además de sostener la idea de una elección interna y simultánea para todos los partidos políticos.

“La discusión sobre el desdoblamiento de las elecciones municipales con las nacionales quedará para cuando se discuta la Ley Orgánica de las Municipalidades”, reconoció un legislador oficialista con diálogo directo con el gobernador Daniel Scioli y con varios intendentes del Conurbano.

Es que a pesar de las presiones ejercidas desde Olivos para “archivar” el tema, varios jefes comunales no ven con malos ojos votar primero o después por su propia suerte electoral, y así evitar la ruptura con un oficialismo que hoy “nos hace de mancha venenosa”, como dijo socarronamente un intendente del norte del Conurbano bonaerense.

La iniciativa que analizará el peronismo esta semana contempla las internas abiertas y simultáneas pero permite la presentación de listas únicas, algo que no contempla el proyecto nacional y propone la modificación del sistema de representación de las minorías partidarias al instaurar el sistema D´Ont para dirimir los lugares dentro de las listas de candidatos.

En la actualidad, el ganador de una interna peronista se lleva los primeros tres lugares de las listas mientras que los derrotados el cuarto, y así sucesivamente. En el radicalismo, el entramado se da con dos representantes de la lista triunfante y uno de la que salió segunda, siempre y cuando superase el mínimo del 25% de la cantidad total de votos emitidos.

Las internas serán también obligatorias para la totalidad de la población, aunque propondrán un registro para que se anoten quienes no quieran participar, lo cual resultará, a todas luces, engorroso.