El primer ministro de Ucrania, Arseni Yatseniuk, renunció a su cargo envuelto en la polémica con los Panamá Papers, cuya investigación lo señaló como poseedor de tres empresas off shore en el extranjero.
"He tomado la decisión de dimitir", anunció Yatseniuk en un mensaje a la nación emitido por varios canales de la televisión ucraniana.
La decisión se antojaba inevitable tras una cascada de críticas y presiones por parte de todos los socios de la coalición parlamentaria que sostenía su Gobierno, incluidos el propio presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, y la formación política que lleva su nombre.
"Hay una cosa que no se puede permitir: La desestabilización del poder ejecutivo en tiempos de guerra. Y esa perspectiva será inevitable, tras la dimisión no se elige inmediatamente un nuevo Gobierno", subrayó.
La mayoría de lo acusan también de haber sido incapaz de combatir la corrupción y de introducir las reformas estructurales que demanda la comunidad internacional.