Nicole Kidman, Naomi Watts, dos gorros de ducha, un escenario y un beso para la historia. "Tardé 33 años en besar a una mujer con un gorro de ducha", confesó Nicole. Y no, no se refiere a una fantasía erótica. Con ese gesto, la actriz quiso hacer de altavoz para la lucha de sus compañeras por un Hollywood menos sexista.
La intérprete australiana aprovechó los Premios Women In Film’s Crystal + Lucy Awards para sacar a la luz su lado más feminista y dar un discurso con reminiscencias a aquel de Patricia Arquette en los Oscar, en el que el empoderamiento femenino marcaba las pautas. Nicole no dudó en contar cómo era aquella Nicole antes de ser una actriz famosa, sirviendo de ejemplo para todas aquellas jóvenes intérpretes que comienzan sus carreras con temor.
"Cuando tenía 14 años y Jane Campion era aún una aspirante a directora de cine, me ofreció un papel en una película para la universidad titulada “A Girls Own Story”", reveló Kidman en el escenario. "Aún me horroriza reconocer que rechacé el papel que me ofreció. Me excusé en mis exámenes finales, pero la verdad es que en la película tenía que aparecer con un gorro de ducha y besando a otra chica. Yo quería ser el tipo de actriz con un pelazo que besa a hombres, no a mujeres", continuó la actriz.
"Simplemente, no estaba preparada. Pero hoy soy más sabia y quiero decir una cosa. Jane, si estás viéndome, quiero que sepas que estoy lista para ello", aseguró Kidman. Una anécdota que sirvió a la intérprete para pedir a los presentes que ayudaran a las adolescentes a perseguir sus sueños, sin miedo ser juzgadas.
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19 de junio de 2015