- Lavar de inmediato: En la medida de lo posible, se recomienda lavar el envase justo cuando se vacíe. Evitará que el mal olor se adhiera. De no poder lavarlo al momento, asegurate de hacerlo tan pronto llegues a casa. Lo ideal es limpiarlos con agua caliente.
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- Sal: Agregá un poco de sal antes de guardarlo y evitarás que el olor a condimentos fuertes se mantengan en el envase. Sólo recuerdá lavar el instrumento para remover la sal antes de introducir la nueva comida.
- Vinagre: Se recomienda colocar vinagre blanco al envase luego de lavarlo con agua caliente. Dejá trabajar al vinagre por un par de minutos para que elimine los olores restantes. Luego, volvé a lavar el envase.
- Bicarbonato de sodio: Son múltiples las ventajas del bicarbonato de sodio en la cocina. Su uso no se limita a las propiedades leudantes. Es recomendado para eliminar los olores que ya están adheridos al envase. Lo ideal es mezclarlo con agua tibia y colocarlo en el envase por un día. El procedimiento debe repetirse hasta que el olor desaparezca por completo.
20 de octubre de 2014
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