Edición 2009 del libro de los records

Los Guinness de entrecasa

Quiénes son los bonaerenses que aparecen en el libro Guiness. Los pechos de la Sabrok y los penales que erró Palermo. El humano lagarto, el "Beatlemaníaco" y el coleccionista de "fierros" son de acá, del Conurbano.

El libro más vendido del mundo es la Biblia con 6 mil millones de copias. Aunque parezca extraño, le sigue el niño mago Harry Potter con mil millones. En el octavo lugar está la edición de los records Guinness, con 94 millones de copias, lo que no resulta poco para un ejemplar de 150 pesos.

Pero la mística del Guinness supera a la misma editorial. Y ese es el propio record del libro de los records, haber construido a partir de una buena idea editorial un universo competitivo donde el ego humano busca compararse, prevalecer y subsistir.

La excusa de esta nota es el lanzamiento editorial de la edición 2009 del libro pero en el fondo, el verdadero apetito de este informe es la atmósfera social de los records, el paraíso artificial construido por aquellos que logran evadir la gran masa humana a través de la superación, aunque ésta sea absolutamente inútil para la sociedad.

El gran Pifiador

 

Los marcas Guinness del Conurbano están encabezadas, sin dudas, por uno de los casos más curiosos. Martín Palermo, nacido en la localidad bonaerense de la Plata, quien lejos de haber batido el Guinness como máximo goleador, posee un recuerdo gris en el libro de oro de los destacados.

Es el jugador que más penales erró en un mismo partido. Nadie olvidará la tarde negra que tuvo cuando falló tres disparos desde los doce pasos frente a Colombia, por la Copa América de 1999. El primero pegó en el travesaño, el segundo lo tiró a las tribunas y el último se lo atajó Miguel Calero.

 

 

Súper pechugas plásticas

 

La lista de los representantes del Gran Buenos Aires, en materia de batir estadísticas, continúa la diva freak Sabrina Sabrok. La señorita de Temperley, ostentaba la marca de poseer los pechos más voluminosos, pero fue derrocada por la brasileña Sheyla Hershey, ganadora del record de los mayores senos de siliconas del mundo.

Una cosa es conseguir un record y otra es sostenerlo. Por eso la Sabrock, continúa obsesionada en implantarse mayores superpechugas plásticas para volver a ocupar su lugar.

 


Súper baterista


Fernando “Súper” Ballestrasse, de Monte Grande, pasó a la historia como el hombre que más tiempo pasó tocando la batería. Estuvo ¡100 horas! y superó al australiano Arulanantham Suresh Joachim que tenía 84.

El motociclista del fin del mundo

 


Entre los habitantes del conurbano reconocidos mundialmente por sus marcas está Emilio Scotto, de la localidad de San Andrés quien figura allí como el hombre que protagonizó el viaje más largo del mundo en moto: 735 mil kilómetros, atravesando 214 países y territorios, entre el 17 de enero de 1985 hasta el 2 de abril de 1995.

 


El beatle adicto


El argentino Rodolfo Vázquez, posee la colección de artículos de los Beatles más grande del mundo.

La muestra de la colección, cuenta más de 5.000 artículos. Vázquez, que ahora tiene 44 años, lleva 34 juntando todo el material que cayó en sus manos sobre el mítico grupo de Liverpool.


El hombre de las miniaturas


Otro caso contundente, llamativo y extraordinario, es el récord de poseer la colección más grande de autos en miniatura. Con más de 7 mil coleccionados desde 1962, Sergio se ubica adelante de todos. Sin embargo lo más llamativo de él es ser el dueño de un legendario Batimovil, el auto que se usó para Batman, la famosa serie de televisión.

Un cuadro que no entra en ningún lado


La pintura más larga del mundo es argentina. En efecto, fue exhibida en la Costanera Sur. Ocupaba nueve cuadras y la tela, dividida en tres paños, cubría el tramo ida y vuelta con un total de de 2389 metros. Esta iniciativa fue organizada por la ONG Asociación Mutual de Recursos Ambientales Ecológicos (AMURA), que está asociada a la Unesco. Pintaron desde artistas con renombre como Marta Minujin, Texier, Monteverde, Melo, Avaca, De Negri, hasta chicos de jardines de infantes, artistas plásticos, estudiantes, profesionales, amas de casa, integrantes de talleres especiales como “La Estampa”

El hombre lagarto

 

Entre los que aún no están pero siempre intentan, se ubica Alberto Fornés. El hombre tiene 45 años y una peculiaridad que no pasa inadvertida: con más de 1.400 dibujos grabados en todo su cuerpo, es el hombre más tatuado de la Argentina. La cabeza, las orejas, la cara, sus brazos, piernas, pecho y hasta su pene (según dice) están tatuados. Obviamente, no todo está a la vista. Sólo por las noches, cuando hace shows de magia en fiestas o boliches se deja ver un poco más. "Yo quería ser distinto", cuenta. Para eso, desde el 13 de octubre de 1992, cuando se hizo su primer tatuaje, se puso como objetivo agregarse uno cada mes. Su meta: "Llegar al libro Guiness".

El prócer chueco


Finalmente Juan Manuel Fangio es el campeón de Fórmula 1 más viejo: ganó su último campeonato mundial en Mónaco, el 4 de agosto de 1957 cuando tenía 46 años y 41 días.

Fangio también sería el hombre con más campeonatos de Fórmula 1 de no ser por la aparición de Michael Schumacher y sus siete títulos. El piloto de Balcarce ganó cinco veces: 1951 y entre 1954 y 1957.

 

 


Miles de personas en todo el mundo intentarán batir nuevos récords, con la ilusión de que sus hazañas sean reconocidas oficialmente con un diploma y su nombre integre la próxima edición de este peculiar libro, que se publicó por vez primera en 1955. Y es que, como reconoce el propio jefe de redacción del Guinness World Records 2009, Christopher Lee, «sin el público y su pasión no existiríamos», por lo que anima a la gente a agudizar el ingenio.