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Josefa Marcelina Miranda había quedado sola. Su compañero de vida había partido y ella veía su casa de Moreno demasiado grande. Ubicada en el Barrio San Cayetano, frente a Las Catonas, las habitaciones se hacían frías.
La solución vino de la mano de un amigo de su marido. Josefa le dio alojamiento a un matrimonio amigo de su esposo y a sus ocho hijos. La casa de la calle Perú, entre Aguirre y Fulton, se revolucionó. Sus habitaciones no volvieron a ser las mismas.
Todo iba bien hasta el 24 de junio pasado. Josefa viajó a cobrar su jubilación. Como todos los meses, viajaba de Moreno a Capital Federal pero nunca regresó. Desde entonces está desaparecida. Y su casa, ocupada por los diez inquilinos.
Casi sin familiares, una ONG Barrial fue la encargada de iniciar la búsqueda de Josefa y de contactarse con Comisión Esperanza, una organización que se encarga de la búsqueda de las personas.
Hasta el momento no hay pautas que indique un posible paradero de la anciana, pero se barajan algunas hipótesis a partir del contacto de la mujer con sus vecinos. Días antes de su desaparición se vivió un hecho llamativo. Josefa quedó fuera de su casa, sin posibilidad de ingresar, cuando uno de los inquilinos puso un candado que impidió abrir la puerta. Un vecino necesitó cortar el candado para permitirle volver a su casa. En ese momento también, la anciana comentó que no se estaba llevando bien con sus inquilinos. Con ocho nenes en su casa le era difícil descansar.
Otra hipótesis apunta al viaje de Josefa. Si sufrió una descompensación o un accidente y lejos de su casa, quizás no pudo ser identificada y al no tener familiares directos a quien avisarle quizás aún sigue internada.
María Esther Cohen Rua lidera la ONG Comisión Esperanza y maneja distintas conjeturas. “Pensar en sus inquilinos es inevitable. Según los vecinos, se vio al hombre sacar cosas de la casa, que serian pertenencias de la mujer. Pero según la fiscalía es el hombre el que puso la denuncia por la desaparición”.
“También hay que pensar en que quizás le pasó algo en capital. La atención en los hospitales y las fiscalías siguen funcionando igual de mal que siempre. Quizás aún no la identificaron”, detalló la especialista.
Por el momento se están buscando familiares y conocidos de la mujer. Comisión Esperanza está buscando a los hijos del marido de Josefa, quienes no eran sus hijos, pero con quienes tenía relación. “Son de apellido Heredia, uno es de Gendarmería y otro de Policía Federal”, finalizó Cohen Rua.
La Comisión Esperanza puso a disposición un teléfono para brindar cualquier información sobre el paradero de Josefa Marcelina Miranda: (011) 4716-1413.
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6 de agosto de 2013