Tras 14 años en pareja y tres hijos, Guillermina Valdés y Sebastián Ortega pusieron fin a su relación y se lo contaron a su círculo íntimo. Después de dar la noticia, la modelo y el productor pasaron año nuevo separados.
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No todo lo que reluce es oro. Lo que parecía una pareja perfecta e inquebrantable, parece haber llegado a su final. Durante la Navidad anunciaron a sus íntimos que la separación era un hecho consumado.
Según informa la revista “Pronto”, el 31 de diciembre la pareja la pasó separado: Sebastián junto a sus hermanas Julieta y Rosario en Punta del Este y Guillermina con los tres hijos de ambos.
Sin embargo, la separación habría terminado de buena manera, ya que no hubo terceros en discordia y saben que su relación tiene que ser óptima para no terminar perjudicando a los niños.
11 de enero de 2012