La Plata: nuevo capítulo en el Concejo Deliberante por la crisis climática
A días de que se declarara la "emergencia climática" en la capital provincial por un plazo de 18 meses, el concejal Luis Arias presentó un proyecto para reducir el riesgo en inundaciones
La crisis ambiental en la ciudad de La Plata continúa siendo motivo de disputa entre oficialismo y oposición en el Concejo Deliberante local. Y a días de que la ciudad fuera declarada en "emergencia climática" por un plazo de 18 meses, desde el Frente de Todos no piensan cerrar una discusión que, en los últimos años, se volvió constante.
En esta ocasión, fue el concejal opositor, Luis Arias, quien tomó la posta durante la última sesión del cuerpo legislativo: el edil presentó un proyecto para la implementación del Plan de Reducción del Riesgo de Inundaciones (Plan RRI) en la capital bonaerense, en base a una serie de informes elaborados por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
Según expresó Arias, "la Municipalidad celebró un convenio en 2019 con la UNLP para realizar un plan de prevención de riesgo hídrico (...) a partir de ese convenio, la Universidad presentó diversos informes y un protocolo de prevención con información cartográfica".
"Pedimos que se apruebe a través de una ordenanza para que sea exigible y para que no sea un mero informe que quedó arrumbado en una biblioteca", exigió el representante del FdT en el HCD platense.
En busca de respuestas a un problema sin solución
Mientras tanto, los roces dentro y fuera del Concejo Deliberante por la "emergencia climática" no parecen tener fin. De hecho, fue el propio Arias quien levantó la voz luego de conocerse la aprobación del proyecto, impulsado por los sectores afines al intendente Julio Garro.
"La emergencia climática es sólo un título, no contiene ninguna medida", cuestionó el concejal tiempo atrás, en una serie de fuertes declaraciones que deslizó a los medios locales.
Lo cierto es que la iniciativa -sancionada en base a los fenómenos climáticos inusuales registrados entre 2017 y 2021- le permitirá al garrismo avanzar en un plan de obras de infraestructura, a pesar de las críticas sostenidas desde diversos espacios, como la Asamblea de Inundados de La Plata.