El rector de la Universidad Nacional de La Matanza, Daniel Martínez, fue víctima de un secuestro virtual, en el que lo engañaron diciéndole que su hija estaba secuestrada y debió pagar una importante suma a modo de rescate, aunque todo fue una farsa.
El hecho se produjo a las 3:30 de la madrugada de este martes, cuando Martínez recibió un llamado extorsivo al teléfono de línea de su casa, en la localidad de Villa Sarmiento, partido de Morón. Allegados al rector relataron a 24CON que "cuando él atendió, le dijeron: 'Tenemos a tu hija, hacé todo lo que te decimos si querés vovler a verla'".
Uno de los hechos que llamó la atención fue que los supuestos captores sabían el número del domicilio de Martínez, aunque éste no figura a su nombre. Además, durante la comunicación, los delincuentes intentaron imitar la voz y el llanto de la supuesta víctima, como viene ocurriendo en los casos similares de secuestros virtuales que se sucedieron en las últimas semanas.
"Le pasaron con una mujer, que le pedía por favor que la sacaran de ahí, que quería vovler a la casa. En la desesperación, le dijeron que no llamara a nadie y le preguntaron: '¿Cuánta plata tenés?'", contaron las fuentes a este medio.
Luego de acordar la cifra, los delincuentes exigieron a Martínez que dejara el rescate en una bolsa, a unos 50 metros de la vivienda, que fue cobrado. Y al rato le dijeron: "Como vos cumpliste, nosotros cumplimos". Sin embargo, cuando el rector logró comunicarse al celular de su hija, ella estaba durmiendo tranquilamente en su domicilio.
Durante el día, Martínez radicó la correspondiente denuncia, que quedó a cargo del Juzgado Nº 3 de Morón y la Fiscalía Nº 2. Si bien le quitaron una importante suma por el falso secuestro - que aún no fue recuperada -, todo se trató sólo de un mal trago.
La modalidad delictiva del secuestro virtual, con el nuevo aditamento de la "dramatización" del llanto de la víctima, se viene dando hace tiempo en diversas localidades del Conurbano, y es cade vez más frecuente.
Un mal momento
En declaraciones radiales para el programa de Chiche Gelblung, Martínez relató: "Fue interminable. Gracias a Dios, mi hija no tenía nada. Fue pagar plata y nada más, por un secuestro que no existía".
Luego, explicó que los estafadores estaban al tanto de que su hija vive sola y no con él, lo que les facilitó la maniobra.
"Me pusieron al teléfono una voz de una chica que lloraba, sollozaba. Pensé que era mi hija", confirmó.
1º de abril de 2014
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"Ninguna interpretación o diferencia semántica debe empañar nuestro vínculo", aseguró.
El gobernador Daniel Scioli también salió a respaldar a la Presidenta luego de su comentario sobre La Matanza en Harvard. Qué más dijo.