Un hombre escondía droga, pero su oveja lo deschavó

Ni las mentes más brillantes de la policía, ni el delincuente más despistado pudieron imaginar que el mejor aliado para unos, y el peor enemigo para otros, podía ser un animalito tan inexpresivo como una oveja.

Fueron varias semanas de minuciosa investigación. Se tomaron testimonios, se grabaron secuencias fílmicas y fotográficas y se montó una vigilancia encubierta. Pero al final, quien “señaló” a los policías el lugar exacto donde ocultaban la droga en una casa del barrio San Carlos, La Plata, fue nada menos que una oveja.

Efectivos de la Policía Bonaerense realizaron ayer un allanamiento en una casa ubicada en la calle 35 Bis y 152 donde buscaban drogas. Tras varias horas de búsqueda, dieron con envoltorios de marihuana y cocaína. Pero el hallazgo no fue gracias al olfato policial, sino al de un especial animal. La oportuna ayuda llegó en forma de balidos que señalaban la ubicación de las sustancias.

Así lo aseguraron los propios efectivos que participaron del procedimiento que concluyó con cinco personas detenidas y el secuestro de 581 gramos de marihuana y 152 de cocaína.

Los detenidos son todos mayores de edad y quedaron imputados en el marco de una causa por comercialización de estupefacientes.

La investigación fue realizada por personal de la Delegación de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de La Plata, a cargo del comisario mayor Gustavo Palópoli.

Uno de los ahora aprehendidos había sido denunciado por vecinos, quienes aseguraron que se trataba de una persona violenta que “mantenía atemorizados” a los habitantes de ese sector.

Los pesquisas además sospechaban que el individuo se dedicaba a la venta de droga. Por ello implementaron una vigilancia encubierta en torno a un inmueble de 154 entre 524 y 525 -donde vive el denunciado- y en otro de 35 bis entre 152 y 153 -donde reside quien le facilitaría los estupefacientes para la venta-.

Y finalmente ayer a la mañana allanaron esos domicilios. En el primero, se secuestraron 150 gramos de cocaína y 384 gramos de marihuana.

Por eso tanto el dueño de la casa como su esposa y un ocasional comprador resultaron aprehendidos.

Allí también se incautó una balanza, dinero en efectivo y elementos de corte y estiramiento de cocaína.

Pero lo insólito ocurrió en la otra propiedad, perteneciente a quien, se sospecha, era el proveedor de la droga.

El hombre había ocultado la droga en el fondo del predio. Y, si bien en un primer momento consiguió que no la descubran, al final resultó delatado por su propia oveja.

Fuentes policiales aseguraron que el animal, “con sus balidos”, llamó la atención de los investigadores hacia un sector en particular del predio. “No se movía de ahí”, afirmaron.
Cuando los agentes fueron a revisar allí, se llevaron la sorpresa: descubrieron una bolsa oculta que contenía 19 envoltorios con marihuana y un trozo compacto de la misma sustancia.

Enseguida, tanto el dueño de la propiedad como un ocasional comprador fueron detenidos y también quedaron a disposición de la justicia.

 

 

12 de octubre de 2012

 

 

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