El reemplazante de Bergoglio asumió el arzobispado
Mario Poli fue ungido como nuevo primado de Buenos Aires en la Catedral metropolitana. Estuvieron presentes Boudou y Macri.
La ceremonia de asunción del flamante arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, se realizó en la Catedral metropolitana, con la presencia del vicepresidente Amado Boudou -a cargo del Poder Ejecutivo por el viaje de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a Venezuela-; el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina y el Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
El flamante primado hizo un llamado para que pastores y fieles hagan "juntos el camino de la evangelización" y, tras destacar el "renovado gozo" de muchos argentinos a raíz de la elección de Bergoglio como Papa, invitó a "ofrecer la riqueza del Evangelio a los que viven, trabajan y pastoran nuestra Ciudad, de tal manera que conozcan a Dios Padre y sus dones de justicia, amor y paz".
"Que no me falte en este servicio el amor a los pobres, sufrientes y excluidos, que inspiró a nuestro patrono, el obispo San Martín de Tours, quien supo remover de su corazón toda indiferencia", sostuvo en una misa concelebrada por una decena de obispos, que llegaron desde Pilar en micros tras el plenario episcopal, y cientos de sacerdotes.
Las parroquias porteñas, que suspendieron sus actividades, recibieron con el repicar de las campanas al nuevo pastor porteño, el duodécimo de la su historia.
 |
Tras su ingreso, el vicario general, monseñor Joaquín Sucunza, le presentó el crucifijo, al que Poli besó. Seguidamente, se le entregó la llave de la catedral y, tras visitar al Santísimo Sacramento, comenzó la procesión hasta el frente de la Catedral, donde se hizo la celebración eucarística.
El nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, inició la ceremonia con un mensaje en el que le pidió a Poli que "enseñe y cuide al pueblo de Dios mostrándose como ejemplo de caridad del sumo y eterno pastor de nuestras almas". También dio la bienvenida y saludó al primado como representante del Papa, quien, aseguró, "nos acompaña desde Roma".
Luego entregó al canciller de la curia, monseñor Fernando Risotto, la bula en la que el Papa argentino autoriza a Poli a "tomar posesión de esta sede arzobispal de Buenos Aires".
Tras cumplirse el rito, expresaron su comunión filial al arzobispo los sacerdotes Emilio Riamonde y Mariano Rodríguez, los religiosos Emilio Andrada y Eduardo Rozas, las monjas Leonor y Cecilia, la consagrada Karina Ledesma, los laicos Javier Castello, Ramona Mantilla y César Mele, los jóvenes Tomás Persino y Rocío Santa Cruz, y los niños Tomás Koch y Julieta Calebibich.
Entre los funcionarios nacionales presentes se encontraban los ministros Florencio Randazzo (Interior y Transporte), Alicia Kirchner (Desarrollo Social), Alberto Sileoni (Educación), Débora Giorgi (Industria) y Julio Alak (Justicia).
También participaron del encuentro el secretario de Culto de la Nación, Guillermo Oliveri; y el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez.
20 de abril de 2013
