A un año de la masacre policial en José León Suárez, en la que la Policía Bonaerense asesinó a Franco Almirón, de 16 años, y a Mauricio Ramos, de 17; este viernes por la tarde se realiza un acto en reclamo de justicia.
“Lo hacemos para mantener vivo el reclamo. Queremos que se avance lo más rápido posible en el juicio oral de los culpables, y además investigar a fondo quién tomó la decisión política de disparar”, dijo a 24CON el diputado por el FPV Leonardo Grosso, que será uno de los oradores en el acto.
Enviados por la Jefatura Distrital de San Martín, llegaron al lugar policías de las comisarías 2ª, 8ª y 9ª de San Martín, y de la Policía Bonaerense 2 (PB2). La represión continuó con balas de goma, gases lacrimógenos, hasta que comenzaron a disparar también municiones de plomo.
Mauricio y Franco, que se dirigían en bicicleta a juntar cartón a los basurales de la CEAMSE, se resguardaron tras un montículo de chatarra y fueron obligados a salir por el disparo de una pistola lanza gases, en una práctica de combate. Apenas se expusieron, recibieron disparos con balas de plomo que los mataron.
En la conmemoración de la llamada “Masacre de José León Suárez”, también se dejará “en claro” que durante la investigación de los hechos se cayó la hipótesis de que una banda organizada se había enfrentado con la policía. Lo que refuerza la hipótesis de gatillo fácil. “Es irreparable que los pibes ya no estén, por eso hay una decisión de distintos sectores del kirchnerismo de que no se puede seguir matando pibes”, agregó.
Franco Almirón murió antes de llegar al hospital Belgrano y Mauricio Ramos horas después. Joaquín Romero, de 19 años, fue gravemente herido en el operativo, también con munición de plomo, en el tórax y el abdomen y pudo salvar su vida luego de ser operado.
La fiscalía, a cargo de Marcelo Sendot, requirió la elevación a juicio de los oficiales Gustavo Vega y Gustavo Sebastián Rey acusados por los homicidios de Franco Almirón y Mauricio Ramos y por la tentativa de homicidio Joaquín Romero.
03 de febrero de 2012