Así fue la vida de uno de los padres del Rock
Fundó y disolvió bandas revolucionarias que ayudaron a dar vida a la música Argentina.
Luis Alberto Spinetta se crió como un pibe más de Belgrano en la década del ’50. Hincha de River, que apenas entrada su adolescencia conoció la guitarra a través de las influencias familiares que lo acercaban al tango. Luego, tuvo un “despertar” musical al conocer a los Beatles.
Pero tampoco le alcanzó para volcar toda su creatividad. Su locura. Se volvió a “divorciar” y con 24 años formó otra banda legendaria: “Invisible”.
En tres años el Flaco se la rebuscó para disolver “Invisible”, probar suerte en Estados Unidos, reunir nuevamente a “Almendra”, formar “Spinetta Jade” (junto a Lito Vitale y Pedro Aznar) y tener a su primer hijo, Dante, quien más tarde sería factótum de “Illya Kuryaki”.
Pese a que el clamor popular intentaba convertir a Charly y el Flaco en una suerte de River-Boca, ambos tocaron juntos en un recordado recital de Obras, para luego grabar juntos varias canciones, pero nunca llegaron ponerse lo suficientemente de acuerdo como para grabar un disco juntos; pese a que Spinetta ya había desarmado “Jade”, según publica JardinDeGente.com.ar.
A partir de allí, sólo fue “El Flaco” (con la excepción de “Socios del desierto”, a mediados de los ’90). Su último gran disco fue “Pan”, en 2006. Y el último gran show fue en Vélez, a fines de 2010, cuando pudo darse el gusto de hacer lo que mejor sabía: rearmó y disolvió todas sus bandas en apenas una noche, con la ayuda de invitados de lujo como Charly, Ceratti, Juanse, Mollo y otros tantos.
“El Flaco” siempre será una de los íconos del Rock Nacional, a quien ayudó a crear. A partir de ahora, seguramente se juntará con Pappo, su amigo Diego Rapoport y por qué no Tanguito y Sandro, con quienes compartió la creación y el nacimiento de eso que hoy llamamos con tanta naturalidad Rock Nacional.