Aeropuerto Internacional de El Palomar

¿Qué hacen en Aeroparque?

Con el cierre de Aeroparque, el 30% de los vuelos operan desde El Palomar lo que necesitó un gran trabajo logístico. 65 vuelos por día llenaron de aviones el cielo del Oeste del Conurbano.

La Primera Brigada Aérea de El Palomar desde el aire
La aviación argentina nació en el Conurbano, y es en esta misma región donde se encuentran los mayores aeropuertos del país junto con la mayor concentración de aeronaves. Tras los vuelos en globo sobre Buenos Aires, siendo Aarón de Anchorena y Jorge Newbery los pioneros, se realizó en 1910 desde el hipódromo de Longchamps el primer vuelo a motor del país. A la par nació el Aeroclub Argentino, y en 1912 se creo la Escuela de Aviación Militar ubicada en El Palomar. En el mismo partido y a pocos kilómetros operó el primer aeropuerto internacional del país en la actual ubicación del Aeródromo de Morón, sede del Museo Nacional de Aeronáutica.

La Brigada Aérea de El Palomar, casi 100 años después de su creación, alberga hoy a los vuelos de varias aerolíneas de cabotaje tras el cierre del Aeropuerto Jorge Newbery, en donde se está construyendo una nueva pista que permitirá operaciones más seguras, de aviones de mayor porte y en menor tiempo. En El Palomar funciona la Primera Brigada Aérea de la Fuerza Aérea Argentina que tiene como función principal el transporte aéreo. Junto a los pesados cuatrimotores Hércules C-130 camuflados operan los coloridos y esbeltos aviones de pasajeros de Andes, Pluna, Sol, AeroChaco y BQB.

El traspaso de los vuelos necesitó el trabajo conjunto de distintos organismos estatales y privados. Así la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) junto con la Policía de Seguridad Aeroportuaria, Aeropuertos Argentina 2000 y el ORSNA (Organismo de Regulación del Sistema Nacional de Aeropuertos) organizaron y prepararon el traspaso de los vuelos de al terminal porteña al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini de Ezeiza, a la Primera Brigada Aérea de El Palomar y al aeropuerto de San Fernando.

Si bien estos cambios ocasionaron algunos problemas en Ezeiza, que se agravaron con varios y reiterados conflictos gremiales, distinta es la situación de El Palomar.

 

 

La internacionalización de la base militar

Desde la Asociación de Personal Aeronáutico, Rodrigo Borras explicó a 24CON como operan las aerolíneas desde el oeste del Conurbano: “Es más tranquilo que en aeroparque, al ser menos operaciones, menos líneas, los aviones, los pilotos, operan más tranquilos, con mas tiempo entre vuelo y vuelo, es una operación mucho mas desconcentrada que en Aeroparque. Ezeiza es distinto, son dos realidades completamente diferentes”.

Según apuntó Borras los pasajeros de las líneas que operan desde El Palomar pueden realizar el Check In en Aeroparque y luego, con micros provistos por las aerolíneas, trasladarse hasta la brigada aérea para comenzar el vuelo, o bien, si lo prefieren pueden directamente presentarse en El Palomar. “La única diferencia con aeroparque es que en EL Palomar no se permiten acompañantes, por una cuestión de espacios y seguridad sólo puede ingresar el pasajero, los familiares o amigos que lo acompañen lo pueden hacer hasta la entrada de la base. Pero como la mayoría son vuelos cortos, y de trabajo, no hay muchos acompañantes”.


Para la cómoda operación de los procedimientos de pre-embarque, se colocaron junto a la aerostación de El Palomar dos carpas que ofician de sala de espera, “están alfombradas, con aire acondicionado, tienen WiFi como si fuera Aeroparque” apuntó Borras y continuó “también se dispusieron dos terrenos cercanos a la entrada del aeropuerto para estacionamiento. La Municipalidad de Morón junto con la Fuerza Aérea acordaron que haya personal de tránsito y policías custodiando en la zona”.

Desde la Administración Nacional de Aviación Civil explicaron a 24CON que fue necesario trasladar distintos organismos que operan en conjunto en todo aeropuerto internacional. Así en El Palomar funcionan hoy una oficina de Migraciones, Cenasa, Aduana, bajo el control de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). El perímetro de la base continúa bajo control militar mientras que el sector donde operan las aerolíneas es custodiado por la PSA.

Desde la Fuerza Aérea Argentina, el vocero de prensa Capitán Mariano Mohaupt aclaró a 24CON que los vuelos de las aerolíneas no interrumpen las operaciones militares de los aviones Hércules y Fokker 28 que habitualmente vuelan desde El Palomar y que la 1era Brigada Aérea cumple con todas las tareas asignadas sin ningún inconveniente por la presencia de los aviones civiles.

Hasta diciembre los vuelos de Aerolíneas Argentinas, Lan, Tam y otras empresas regionales que operaban desde Aeroparque lo harán desde Ezeiza. Los vuelos privados y taxis aéreos lo harán desde San Fernando y desde el palomar continuaran aterrizando y despegando los 65 vuelos diarios que están programados. 

 

El Nuevo Aeroparque

 

Los trabajos en el Aeroparque Jorge Newbery apuntan a optimizar las operaciones aéreas mejorando la seguridad y los tiempos necesarios para cada despegue y aterrizaje. Es la primera vez en 35 años que se realiza esta tarea con una inversión de 70 millones de pesos. El objetivo es optimizar la seguridad operacional de la estación aérea y brindar mayor confort al pasajero.

 

Las obras incluirán reacondicionamiento del pavimento en el sector central de la pista para mejorar su prestación para las nuevas aeronaves de vuelos internacionales. Además, se realizará un trabajo final de ranurado para evacuar el agua de lluvia, lo que permitirá evitar el hidroplaneo de los aviones.

 

Ya comenzó la demolición del viejo hormigón y en un plazo que no superará el el 1° de diciembre, se ejecutarán el nuevo hormigón con tecnología de punta (máquina terminadora de moldes deslizantes), el ranurado de la nueva superficie y la pintura de las señales indicadoras de pista.

 

Pero estas no serán las únicas tareas que se llevarán a cabo. En la terminal se ampliarán y renovarán integralmente los sectores de embarque y arribos; en el primer piso, se agrandará la superficie destinada al preembarque con mayor espacio para el sector de gastronomía y locales comerciales, mientras que en la planta baja, se ampliará y remodelará el sector de Duty Free y migraciones, algo que permitirá agilizar el trámite de los pasajeros.

 

Por otra parte, en el sector de arribos, se aumentará la superficie de la sala de recepción de equipajes y se incorporarán dos modernas cintas de entrega de valijas.

9 de noviembre de 2010


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