La muerte de la jirafa Ghali desnudó las miserias del zoológico de Bruera

Según contó uno de los empleados, el último sábado el animal tenía hipotermia en la parte trasera de su cuerpo. “Además estaba lleno de barro. El recinto cuenta con dos aperturas, en esas condiciones es muy difícil darle calor”. Desde la dirección del zoo negaron esas versiones y aseguraron que el animal murió porque era longevo.

Pero los trabajadores del Zoo, contaron que “el lunes, a las 8.20, el animal se cayó; y el martes, luego de hacer todo lo posible por salvarlo, murió cerca de las 5”. Hoy se darán a conocer los resultados de la necropsia, pero, según pudo saberse, “el animal tenía varias bolsas de nylon en su estómago que le habrían desencadenado una complicación gástrica”.

“El recinto tiene que tener un alambrado fino para que al animal no le llegue la basura que vuela y además para que la gente no le tire cosas. Pero esto no se cumplía y entonces la jirafa se comía las bolsas”, aseguró uno de los empleados.

También se refirió a las condiciones del quirófano. “El polvo es continuo, en esas condiciones es imposible hacer una operación”. “Estamos muy tristes y esto no lo vamos a dejar pasar. Fue una negligencia del Municipio, porque el animal no se pudo salvar”, expresó.

Los otros recintos de los animales también presentan problemas y que no cuentan con las condiciones de seguridad. “El elefante, que es un emblema de este lugar, su recinto está en unas condiciones terribles. Hay mucho verdín y se corre el riesgo de que el animal se resbale”, contaron.

Agregaron que también hay problemas con el lugar de hábitat del hipopótamo. “Allí también hay problemas, el lodo llega hasta las rodillas, si tuviéramos el mismo problema que tuvimos con la jirafa, sería muy difícil trabajar”.

La muerte de la jirafa se produjo en un contexto en que los empleados denunciaron faltante de comida e irregularidades en la entrega de pasto, frutas y lácteos. Al respecto, el lunes se presentó un pedido de informes al Ejecutivo para que se expliquen los motivos por los que el zoológico “se encuentra en el actual estado de abandono”.

En tanto, Daniel Arregui, director del Zoológico, dio una versión diferente de los hechos. Explicó que la jirafa era longeva y que murió por causas naturales. “Era una jirafa muy querida, que llegó en los ‘90, tenemos mucha congoja. Era un animal muy domesticado, durante su juventud levantaba en su cabeza a los empleados. Además superó la media de edad, porque las jirafas viven entre 16 y 20 años”, expresó.

Ghali era un macho cuyo nombre en Suahili, dialecto del África Oriental, significa Querido. Llegó en 1990 proveniente de un zoológico de Alemania. Sus órganos serán donados al Museo de Ciencias Naturales para su estudio, mientras que sus testículos se entregarán al banco genético del proyecto Arca.

06 de agosto de 2010