Hurlingham, el distrito que se olvidó de la democracia

El escándalo que sacudió al Ejecutivo de Hurlingham tras la revelación de un informe que muestra la conexión de un funcionario público local con el Batallón 601 durante la última dictadura militar, continúa con una serie de denuncias que llegan a los despachos del oficialismo y lo acusan de “autoritario”.

El hombre en cuestión es Andrés Antonio Raiola, un puntero ligado a la implementación del Programa de Ingreso Social “Argentina Trabaja”, área que depende de la Secretaría General del Ejecutivo a cargo del Intendente Luis Acuña, quien “cumplió tareas como Personal Civil de Inteligencia (PCI) del 601”.

En este contexto, altas fuentes municipales manifestaron a 24CON que la política que rige las huestes de Acuña es “personalista y tiene tintes autoritarios”. Y se manifestaría así en diferentes aspectos, como “la no disposición de un organismo de Derechos Humanos, la falta de un defensor del pueblo y la ausencia de oficinas anti corrupción”, entre otras cuestiones.

“Por otra parte, todo lo que tenga que ver con el deliberativo se le da importancia menor, por eso no tiene página web el HCD”, destacó la fuente.

A la espera de una respuesta formal que explique la puesta en escena de Raiola en las filas del peronismo, la oposición se hizo eco de una placa homenaje a un dictador que provoca descontentos en las calles del distrito y que “todavía está firme”.

Es la dispuesta en Jauretche 1492, en el céntrico espacio más conocido como “las 5 esquinas”, que lleva la siguiente inscripción: “Teniente General Pedro Eugenio Aramburu. 1930-1970. Presidente de la Nación. Gobierno de la Revolución Libertadora. Mártir de la Libertad”.

Por tal motivo, el concejal del Nuevo Encuentro de Hurlingham, Adrián Eslaiman, presentó el jueves 6 de mayo un proyecto de ordenanza para “remover la placa porque no podemos permitir que exista un homenaje a un presidente golpista”.

El proyecto insta a la remoción dentro de los 30 días de aprobada la ordenanza y establece su donación al artista plástico Andrés Zerneri, con el fin de fundirla y destinarla al monumento a la mujer originaria en el cual se encuentra trabajando.

“En el año del Bicentenario, no podemos avalar que exista en Hurlingham una placa homenaje a un presidente golpista, que fusiló civiles y militares argentinos”, remarcó Eslaiman a 24CON y agregó: “Me sorprende que a un peronista no le haga ruido tener en su lugar una distinción a alguien que proscribió el peronismo y que estuvo relacionado con la desaparición del cuerpo de Evita”.

Pedro Eugenio Aramburu fue uno de los propulsores de la autodenominada Revolución Libertadora que depuso al gobierno de Perón en 1955. Durante su mandato se produjeron los fusilamientos de dieciocho militares y nueve civiles.

“El municipio no quiere entrar en la modernidad. Acá se da algo particular, los concejales representan al intendente de cara al pueblo. Hay una inversión de la representatividad. Parece una alcaldía del siglo pasado”, finalizó el edil.