Conmoción por la virgen que llora sangre
Los vecinos se acercan a rezar, pedir deseos y sacar fotos. Incluso aseguran que transmitió un mensaje. ¿Fraude o milagro?
Alrededor, algunos vecinos no salen de su estupor. Armados de celulares, cámaras de fotos y filmadoras, registran el ¿milagro? y copian con birome y papel al detalle el mensaje que la madre de Jesus -según la fe cristiana- habría comunicado a pocos días de la navidad. Algunos espían desde lejos, incrédulos. Otros, tocan la figura y juran sentir el “regocijo” de la presencia celestial.
Lo cierto es que en esa esquina de La Matanza sobran las preguntas. Y la única certeza es que al igual que la fe de algunos, brota la desconfianza de otros ante la falta de respuestas –o lo que es peor- respuestas a medias o evasivas ante consultas tan simples y básicas como ¿de quién es la virgen?.
A pocos metros, la mujer con la virgen en la mano se identifica como Marta Varela. Se la nota emocionada con la tarea de extender en lo alto de los brazos a la imagen, igual que los futbolistas muestran un trofeo. A su costado, un joven sigue los movimientos. Se presenta como Gonzalo Yensen y ambos parecen más abiertos a contar detalles.
“La virgen me la regalaron ayer a las seis de la tarde y a las doce de la noche vi que empezó a llorar sangre. Y hoy a las seis de la mañana se repitió”, aseguró Marta. Consultada sobre quién le dio el obsequio se limitó a decir “Unos amigos de San Miguel”. Sin embargo, también insistió con que la virgen “es de todo el barrio”.
Ante la pregunta de si es vecina de ahí, Gonzalo manifestó que se mudaron hace menos de un mes al barrio, aunque prefiere no decir en que casa viven “por seguridad”. Por ese mismo motivo, tampoco dan la identidad de la persona que tres días antes habría recibido el extenso mensaje de la virgen que precedió a las lágrimas de sangre.
“Nosotros vivimos en familia pero no somos familiares”, suelta Gonzalo. “Somos de la Obra ‘En nombre de Jesús’, y vivimos haciendo el bien como una familia aunque no seamos una familia de sangre”, aclara. Y agrega que tiene una sede en Capital y un predio en Tortuguitas, desde donde promulgan la palabra de Dios.
Sin embargo, la mayoría de los presentes se conforma con lo que ve. Tocan la imagen, se llevan muestras en pañuelos y rezan bajo el sol de la tarde. Algunos escucharon que en Córdoba y Salta sucedieron fenómenos similares y se contentan de tener la versión matancera del milagro. “La virgen va a ir casa por casa, porque es de todos acá”, finalizó Gonzalo. Y cerró el canal para más preguntas.
Cuando cae la tarde, esa esquina de Lomas del Mirador deja a todos contentos. Los creyentes, tienen su milagro en vivo. Los escépticos, una pila de contradicciones, dudas y cabos sueltos para restar crédito al fenómeno.
El mensaje
Llamativamente, el mensaje que recibió la persona sin identificar preanuncia más muestras de fé. En él, la virgen se comunica utilizando el “vosotros” y no ahorra en reproches para la humanidad.
Textualmente dice: “Amados hijos, estoy haciendo mi visita en varias ciudades del mundo pero aquí digo: Si no creeis a mi sagrado maestro, hijo de mi sangre, el padre quiera que me creais a mí.
Oidme mundo infiel, oid mi voz clamando amor y unidad entre vosotros, pidiendo en el nombre de mi Señor, maestro e hijo que os ameis, que os sigáis sus palabras, esas palabras benditas que trasmite a través de manos sagradas que nuestro Señor eligió.
Haced caso, sean buenos hijos, que yo como vuestra madre echaré mi manto de piedad, misericordia y amor en vosotros.
Mi hijo dijo falta poco para oir al padre y yo como parturienta dolorida antes de su llegada al mundo-tierra os digo que en verdad nada de lo que él dice se retrasa o se equivoca, faltan pocos momentos para que se produzca la Gran Revelación.
Santos y amados humanos, oid a vuestra madre que a pesar de vuestros errores os ama con el corazón.
Cumplid con el señor, asi como yo cumplí por amor al padre entregando al salvador de esta humanidad 2009 años atrás.
Mi corazón es de vosotros, vosotros podeis darme el vuestro y así unirnos para la eternidad en el más sagrado nombre del padre.
No seais tan desobedientes y tan malos hijos conmigo, yo solo os amo y velo por vosotros. No olvidéis que mi dolor es verlos tan alejados el uno del otro”.