“La parte frontal de nuestro cerebro, el área requerida para el funcionamiento ejecutivo, no trabaja apropiadamente cuando no dormimos lo suficiente”, dice Christopher L. Drake, doctor, director de la junta de directores de la Fundación Nacional de Sueño de Estados Unidos e investigador del biocientífico en el Hospital de Trastornos del Sueño y Centro de Investigación Henry en Detroit, Estados Unidos. “Esto significa que vamos a tener tiempos de reacción más lentos y nos perderemos cosas. También podemos tener problemas de memoria simplemente debido a que nuestra capacidad para consolidar la memoria ocurre predominantemente en la noche”, dice el especialista.
Si regresar a la cama o llamar para decir que estás enfermo no son la opción, aquí hay cuatro consejos para superar el día.
- Tomá una siesta lo más pronto posible: si no podés hacer esto en tu oficina, mueve tu automóvil a la parte más alta o más baja del garaje de estacionamiento (o en algún lugar donde sea menos probable que te molesten) y dormí un poco. “Siempre le recuerdo a la gente que no hay sustituto para el sueño”, dice Drake. “Una siesta corta de media hora a una hora puede ser extremadamente refrescante y ayuda a contrarrestar la acumulación de algo de esa somnolencia”.
- Cambiá tus tareas: si es posible, hacé las cosas rutinarias aburridas en la mañana cuando estás más alerta (para que no te quedes dormido intentando completarlas después). Guardá las tareas más estimulantes para después del almuerzo para ayudar a despertar tu cerebro, ya que a menudo te sientes más somnoliento en la depresión de la tarde, gracias a los ritmos circadianos naturales del cuerpo.
- Cuidá lo que comés: hablando del almuerzo, tu día sin sueño no es el día para comer una pasta pesada. Podrías apreciar inicialmente la descarga de azúcar, pero eso pronto será seguido por el temido bajón de azúcar. Los carbohidratos aumentan el nivel de triptófano en tu cerebro, lo que causa que fabrique serotonina, un neurotransmisor que produce sensaciones de calma y somnolencia. Eso suena encantador en teoría, pero no es ideal cuando ya estás demasiado cansado en el trabajo. Mejor pedite una ensalada.
- Movete: cuando sientas que tu cabeza está a punto de golpear el escritorio, levantate y movete. Subí las escaleras, caminá para aumentar tu alerta. Algo extra: ejercitarte durante el día te ayudará a dormir mejor en la noche.