"No es un congelamiento, es un acuerdo voluntario"

Lo aseguró Axel Kicillof tras firmar el acuerdo de precios con supermercadistas. Entrará en vigencia el 1º de enero e incluye 180 productos.

 

En el Salón de las Mujeres de Casa de Gobierno, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, junto al ministro de Economía, Axel Kicillof, y su gabinete, anuncian junto con los supermercados y la industria el nuevo acuerdo de precios por 180 productos de primeras y segundas marcas que regirá desde el 1º de enero. 

Kicillof dijo que "esto no es ni un congelamiento, ni es congelamiento con control de precios, sino un acuerdo voluntario de precios entre el Estado Nacional y los principales empresarios del sector".

En la conferencia que brinda el ministro en Casa de Gobierno, agregó que "habrá un monitoreo permanente, y con un sistema de alerta temprana estaremos avisados cuando haya tensiones para examinar al alza o baja determinados productos".

"El sector privado debe acompañar las politicas del gobierno, y hacer los esfuerzos correspondientes. Esa es la receta de este Gobierno, y la Presidenta nos pidió que mantengamos un diálogo permanente con los privados", agregó.

Entre los referentes de la industria que firmaron el acuerdo están los popes del supermercadismo nucleados en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), y las cámaras del interior CAS y FASA. Paralelamente, asistirá la Coordinadora de Productos Alimenticios (Copal), y los grandes fabricantes como Ledesma, Arcor, Unilever, Pepsico y Mondelez (ex Kraft), que son el eslabón de la cadena considerado por el gobierno como clave para garantizar la estabilidad de los precios convenidos hasta el 31 de marzo, fecha en la que vencerá la primera parte del acuerdo.

El listado de productos y precios fijos contendrá 180 unidades, y algunos productos tendrán una opción de segunda marca. Por esta razón, se especula con que el neto de productos ofrecidos será de alrededor de 120.

Luego de arduas discusiones, en las últimas horas se logró incluir en la canasta al pan lactal y, potencialmente, al pan fresco que elaboran los supermercados. Además, habrá aceite, farináceos, algunos cortes cárnicos, frutas y verduras, lácteos, y productos de higiene personal y hogareña.

En el acuerdo de los 500 productos, este punto había sido el de la discordia. Sin valores de referencia calculados con toda la cadena, los grandes comercios adulteraron precios para especular y terminaron conduciendo al convenio a un estadio de escasa utilidad para el consumidor.

20 de diciembre de 2013

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