Segundo caso de coronavirus en la Villa 31 y los vecinos reclaman test y aislamiento

Confirman el segundo caso de coronavirus en la Villa 31, la Ciudad de Buenos Aires lo comunicó este miércoles, apenas un día después de conocerse el primero. Se trata de una mujer de 36 años, asmática y con problemas renales.

El popular barrio de la zona de Retiro registró un nuevo caso de Covid-19, mientras, los vecinos del lugar le reclaman a las autoridades del Gobierno de la Ciudad más controles y aislamiento preventivo para 12 personas que compartían el baño con el primer caso, informado ayer.

Este martes se conoció el primer caso, de una mujer que reside en el barrio porteño Padre Carlos Mugica. Dio positivo de coronavirus y así se convertía en "el primer y único caso de Covid-19 en la zona", informó este martes el ministerio de Salud de la ciudad de Buenos Aires, pero, 24 horas más tarde se confirmó el segundo caso, en medio del reclamo de los vecinos.

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Respecto al primer caso, el Gobierno porteño detalló en un comunicado que la confirmación de ese contagio se conoció este lunes por la noche y que se cumplió con el protocolo establecido para los casos de coronavirus.

La mujer, de mediana edad, se acercó el pasado viernes tras comenzar a tener síntomas compatibles con los del coronavirus al Punto de Atención que el Ministerio de Salud porteño posee en el barrio de Retiro, desde donde "fue trasladada a la Unidad de Urgencia (UFU) de un hospital de la Ciudad".

"Desde el primer momento la mujer se encuentra aislada y ya tuvo el testeo correspondiente que confirmó su diagnóstico", expresaron las autoridades porteñas, quienes también indicaron que desde la Secretaria de Integración Social y Urbana se contactaron "con las únicas personas con la que ella mantuvo contacto estrecho". 

Sin embargo, sus vecinos aseguran que la mujer compartía al baño con otras "12 personas", que no fueron testeadas ni fueron colocadas en "aislamiento preventivo", en momentos en los que se conoce el segundo caso del barrio, tan sólo 24 horas después, y la alerta de los habitantes del lugar hace crecer el temor de que se disparen sin freno los casos en la popular Villa 31.