Cómo empezó a propagarse el virus que tiene en vilo al país

El brote de hantavirus que se declaró en Epuyén y ya causó 11 muertes, comenzó en un cumpleaños de 15 realizado el pasado 3 de noviembre en esa localidad chubutense, al que asistió como invitado Víctor. D., de 74 años, un hombre de campo jubilado que reside en la zona rural próxima al pueblo y se dedica a la recolección de hongos silvestres.

"Estimamos que se contagió juntando hongos y sin saber que portaba la enfermedad fue a la fiesta de cumpleaños", comentaron a Télam fuentes sanitarias que se encargaron de repasar la crónica del brote por el cual murieron 11 personas en la cordillera del Chubut y otras tres en Entre Ríos, Salta y La Plata. El poblador salvó su vida y se recuperó, pero tomó contacto directo con al menos cinco personas en el evento, entre ellos una amiga de la cumpleañera (14), que fue la primera víctima, el 3 de diciembre.

El 11 de diciembre murió Aldo Valle, de 61 años, empleado municipal de Epuyén, y luego fallecieron sus dos hijas: Loreley Valle, del área social de esa comuna y Jessica Valle, de 30. De ese mismo grupo familiar murió también un joven de 16 años.

"La historia de la familia Valle es realmente desgarradora y estamos viendo cómo hacer para mitigar tanto sufrimiento", dijo el intendente de Epuyén, Antonio Reato. Por ejemplo, se tramita que el viudo de Jessica Valle, quien trabajaba como portera de escuela y era el único sostén de familia, pueda ocupar el puesto de su mujer.

El otro muerto en Epuyén fue Robinson Cansino (80), boletero de una empresa de colectivos de larga distancia, mientras que también murieron Patricia González, de 38 años, quien trabajaba en atención al público en el hospital de Epuyén, y Celia Troncoso, de 64 -quien murió los primeros días de enero-, ex pareja del hombre de campo que transportó el virus desde el bosque al cumpleaños.

También Patricia Henriquez, de 29 años, la chilena que se contagió en Chubut y luego falleció en su país. Y por el mismo contacto falleció Jessica Patricia Luengo (26), empleada municipal de Trevelin, a 140 kilómetros de Epuyén, quien contagió a su madre, Susana Brione (49), la última fallecida.