Asadito K, con achuras y gastadas a Clarín
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Secundado por un “mudo” gobernador Daniel Scioli, más que preocupado por la situación económica provincial, Kirchner dio varias definiciones al respecto. Dijo que “habrá que ver en qué momento se puede discutir una mayor coparticipación para la Provincia”, también sostuvo que “el Gobierno Nacional está muy atento a lo que sucede no solo en Buenos Aires sino en todo el país” y, como única sentencia, aseguró que la plata prometida a los intendentes para obra pública “llegará como corresponde”.
En el primer plano estaban en anfitrión, Hugo Curto, Scioli, Raúl Othacehe, Sergio Massa, Jesús Cariglino, el diputado nacional José María Díaz Bancalari y el secretario de Obras Públicas, José López. Detrás de ellos, sentados y algunos de pie, todos los demás intendentes de la Primera Sección Electoral y los legisladores nacionales y provinciales, con la salvedad de Graciela Camaño, que en ese mismo momento estaba recibiendo a Felipe Solá en el Consejo del Partido Justicialista que preside, en San Martín.
“Cada uno puede elegir los amigos que quiera… En definitiva, los peronistas somos muy amplios y todos pueden entrar o salir, como quieran”, dijo al respecto.
El momento de humor se dio, a diferencia de las conferencias de las épocas ganadoras, donde cada ironía era festejada casi a coro, cuando un periodista le preguntó sobre la vuelta de Eduardo Duhalde al escenario político. Nervioso, volcó el vaso lleno de agua que tenía delante, y no tuvo más remedio que salir del paso con una respuesta de ocasión.
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A diferencia de la reunión realizada hace casi un mes en la zona sur, Kirchner se quedó a comer para escucharlos. Muchos tienen sobrados motivos para dudar que el dinero que todavía les adeudan la Nación y la Provincia lleguen en tiempo y forma.
Además del problema económico que aflige a todos los estamentos del estado, existe una particular situación con varios jefes comunales, a los cuales todavía no terminó de aceptar las explicaciones que les dieron por las diferencias que tuvieron las listas locales contra las que él encabezaba.
“Hoy vengo a compartir un momento a temario abierto… Después habrá tiempo para ver qué actitud tomó cada uno”, dijo enigmático. En el encuentro posterior a la conferencia, entonces, Kirchner habló nuevamente de las virtudes del modelo, distribuyó una gacetilla con las medidas adoptadas "en favor" del sector agropecuario que Curto se encargaría de repartir y habló mucho con Scioli.
Los intendentes y legisladores casi no dialogaron con el ex presidente y en uno de los rincones, un hombre que suele tener ingenio a la hora de describir la realidad, tras el discurso de Kirchner, dijo: "entonces seguro que en las elecciones ganamos". La risa tuvo que ser contenida por los pocos que lo escuchaban, todos con la misma opinión.
La humorada de la noche la aportó el propio Néstor Kirchner. Cuando le preguntaron qué opinaba de la nueva ley de Radiodifusión que hoy ingresaba al Congreso contestó, repitiendo su frase ya histórica "¿Qué te pasha Clarín, ahora sí estas nerviosho?"
