La muerte del oficial de policía Juan Roldán en Palermo reavivó la polémica por el uso de las pistolas Taser. La grieta llegó hasta el propio Gobierno y los lados están bien definidos. Ayer fue Sergio Berni, el Ministro de Seguridad bonaerense quien se mostró a favor del uso de armas no letales para las Fuerzas de Seguridad pero en las últimas horas un peso pesado de la gestión de Alberto Fernández marcó la cancha y también se mostró a favor de esta alternativa.
El exjefe de Gabinete y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, manifestó este martes sus condolencias a la familia de Juan Roldán, el oficial de policía asesinado este lunes en Palermo.
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Massa manifestó que "usar Taser, tonfas o cualquier instrumento nuevo que ayude a incorporar tecnología contra el delito es una obligación. Son las herramientas que en Estado de Derecho nos da la Constitución para hacer cumplir la ley".
Y sostuvo que: "debemos garantizar un entrenamiento en estas herramientas menos letales que demandan una capacitación tan rigurosa como las más letales. Necesitamos fuerzas de seguridad capacitadas y con todos los recursos. Es nuestra obligación reequipar, profesionalizar en el uso de nuevas tecnologías, capacitar a nuestras Fuerzas de Seguridad y defender su actuación en el marco de la ley, para que cumplirla sea la regla y el que comete un delito sea castigado".
Por su parte, el que primero había reactivado la polémica fue Sergio Berni. El hombre de seguridad de Axel Kicillof en la Provincia señaló que "lo que pasó vale la revisión de ciertas cuestiones ideológicas que no valoran la vida de la yuta y tienen a la policía como moneda de cambio", aseguró Berni, a solo unas semanas de la revuelta policial de la Bonaerense, que obligó a que intervinieran al gobernador y al presidente Alberto Fernández.
"La Taser es fundamental para situaciones de las características de lo que pasó en Palermo", aseguró el ministro bonaerense y agregó que "en el 2020 no podemos estar discutiendo si la Taser sí o no por una cuestión ideológica", agregó Berni y manifestó: "La gente que discute las Taser no está en la calle y no tiene el riesgo que sus hijos sean apuñalados. No hay duda que con las Taser nos evitábamos dos muertos. En esta situación, la ideología no se puede entrometer. Quiero saber qué pensaría la gente que dice que las taser son como las picanas si el oficial Roldán fuera hijo de ellos".
EL CRIMEN FRENTE AL MALBA
El lunes por la tarde todo Palermo se conmocionó cuando Rodrigo Facundo Roza, de 51 años, asesinó de cuatro puñaladas al policía Juan Pablo Roldán, de 34 años. Al momento del crimen cargaba una mochila donde llevaba el arma blanca con la que mató al inspector de la Policía Montada de la PFA: una hoja afilada suelta envuelta en papel rojo. Luego de agredir al efectivo, otro policía le disparó al agresor, quien murió horas después en el hospital. Roza tenía problemas mentales y no estaba tomando la medicación para su tratamiento.