El presidente Alberto Fernández viajó a Santiago del Estero y Tucumán, para inaugurar obras, en su primera salida al interior del país, desde que se estableció el aislamiento social y obligatorio por el coronavirus, el pasado 20 de marzo, informaron a Télam fuentes oficiales.
Fernández fue recibido en ambas provincias por los gobernadores Gerardo Zamora y Juan Manzur, respectivamente. En primer lugar, Alberto llegó a Santiago del Estero, donde lo esperaba Zamora -un aliado del Frente de Todos- con quien inauguró un importante emprendimiento en esa provincia.
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En este contexto, Alberto ratificó que su gobierno no asumirá "ningún compromiso con la deuda que postergue a los argentinos" y aseguró que la economía del país volverá a "levantarse", como en 2003.
"En estos días que leo en los diarios que corremos el peligro de caer en default mañana, me pregunto por qué se mienten así, si estamos en default desde antes de diciembre, solo que no lo escriben, lo ocultan", advirtió Fernández.
"Renuevo mi compromiso con cada argentino; no vamos a asumir ningún compromiso con nuestra deuda que postergue a los argentinos; no vamos a someter a la Argentina a nuevos compromisos que no podamos cumplir", añadió.
Así se pronunció el Presidente, en la Escuela del Bicentenario de Santiago del Estero, un monumento histórico provincial, cuya obra de reparación está paralizada desde abril del 2019 por la falta de giro de fondos por parte de la anterior gestión nacional, a través del denominado Plan Belgrano.
"Quiero que el mundo nos vea como un país honorable que cumple con sus compromisos, por lo tanto no vamos a hacer más de lo que debamos hacer y que nuestros compromisos no signifiquen una nueva postergación de nuestro pueblo", enfatizó.
"El capitalismo que invierte pensando en que todos accedan al producto que se produce, ese es el mejor capitalismo", aseguró y exhortó a "construir otra sociedad" y una "economía más solidaria, que termine con esa lógica de la meritocracia", por la cual "el rico más mediocre tiene más posibilidades que el más brillante de los pobres".
En ese sentido, advirtió que la "economía no es una ciencia exacta", sino "una ciencia humanista que nació para distribuir mejor la riqueza entre los hombres" y garantizó que su gobierno trabajará para que "rápidamente la economía se ponga en marcha" una vez que se haya superado la emergencia sanitaria causada por la pandemia de coronavirus, como ocurrió a partir del 2003 tras la crisis social y económica del 2001.
LA VISITA A TUCUMÁN
En su segundo destino presidencial, en Tucumán, Fernández visitó la planta de la firma Scania, el Hospital del Este "Eva Perón" y una planta de tratamiento de residuos cloacales, según informó el gobierno de Manzur.
El presidente aseguró que "el Estado está presente donde alguien tienen un síntoma y lo aísla para atenderlo", con lo que las posiblidades de contagio de coronavirus "disminuyen", pero aclaró que "queda en los gobernadores qué actividad se abre y cuál no" en medio del aislamiento social.
En ese sentido, asumió que "no todos tienen la misma suerte", porque donde los asentamientos poblacionales son más grandes "el problema es más agudo", como en los casos de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, donde lo importante es que "estamos trabajando todos juntos", en una conferencia de prensa en Tucumán, segundo destino de su primera gira por el interior del país desde que se resolvió el aislamiento.
Durante su visita a Scania se dio "el gusto de manejar un camión" y que eso "no lo olvida más", y celebró en broma esa acción diciendo que "tiembla Moyano", en alusión al jefe del gremio de los camioneros.
Fernández recorrió la planta de Scania, ubicada en Colombres, Cruz Alta, a 15 kilómetros de la capital tucumana, que reabrió sus puertas el 27 de abril pasado luego de presentar un estricto protocolo sanitario, como parte de las actividades desarrolladas durante su visita a Tucumán.
Scania es parte de uno de los sectores productivos exceptuados de la cuarentena obligatoria y para el reinicio de su producción cuenta con la aprobación de las autoridades provinciales, el gobierno nacional y los sindicatos del sector.
"Creo que los argentinos hicimos muy bien las cosas y no debemos relajarnos, ni bajar los brazos; el problema no terminó, está tan latente", expresó Fernández en una conferencia de prensa que ofreció en Tucumán.
"Esto no es un éxito de un gobierno, si no un éxito de una sociedad", afirmó Fernández, quien aceptó no obstante que "la cuarentena cuesta plata" y su gobierno está dispuesto a "auxiliar a todos los argentinos para que sufran lo menos posible".
"El que no quiere ver es un necio; el IFE (Ingreso Familiar de Emergencia) tuvimos que dárselo a gente que el Estado no registraba y no fueron 20 personas, fueron 8 millones de argentinos", dijo.
"Ahí nos damos cuenta qué injusto que es ese país que construimos, el olvido al que fueron sometidos millones de argentinos y nosotros tenemos que construir un país distinto".
Durante su paso por Tucumán, luego de la planta de Scania, se trasladó hasta la ciudad de Banda del Río Salí, donde recorrió el hospital modular que fue construido en forma anexa al Hospital del Este "Eva Perón" y que incorporó 120 camas, que se suman a las 130 que posee el principal centro de salud del este tucumano para atender posibles casos leves o moderados de la Covid-19.
Más tarde, encabezó el acto de inauguración de una planta de tratamiento de líquidos cloacales ubicada en el municipio de Las Talitas, al noroeste de la capital provincial, donde a través del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa), el gobierno concretó el traspaso de esta obra a la órbita provincial para su habilitación y puesta en funcionamiento, con un desembolso de 190 millones de pesos para beneficiar a 130 mil vecinos.