El allanamiento en una vivienda de Pilar, con el objetivo de secuestrar armas de fuego, terminó en escándalo: los policías que fueron al lugar se robaron 325 mil pesos y fueron descubiertos por los propietarios. De los tres policías involucrados en la situación, dos quedaron libres mientras que otro sigue siendo investigado.
Los efectivos ingresaron a la vivienda en el marco de la investigación llevada adelante por la UFI 4 de Pilar.
En ese marco, una mujer de 28 años, domiciliada en la parte trasera de la vivienda, aseguró que tras la requisa le faltó dinero de su domicilio. Así se inicia una discusión tensa con los efectivos policiales que quedó registrado en un video que captaron los denunciantes.
A su vez, varios vecinos de la zona se sumaron a la protesta por el presunto robo policial por lo que se vivieron momentos de tensión en el lugar.
En ese marco, los policías se subieron al móvil policial e intentaron retirarse, sin poder irse debido a que la gente les bloqueaba el paso y le exigían la restitución del dinero.
Los policías solicitaron apoyo inmediato y los efectivos que llegaron, tras resguardar la integridad de todos los policías, subieron al móvil policial y debajo del asiento trasero izquierdo hallaron 325 mil pesos, lo que desató la ira de la gente que denunciaba el robo.
La situación fue informada a las autoridades de la fiscalía interviniente, quienes iniciaron una causa por robo, abuso de autoridad, e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Los tres policías involucrados fueron aprehendidos, dos de ellos ya recuperaron la libertad, mientras que Asuntos Internos mantiene la investigación sobre el tercero.