Caso Ángeles: analizan  ADN en una aspiradora

El procesamiento contra el encargado Jorge Mangeri, acusado del homicidio de Angeles Rawson, llegó a la Cámara del Crimen, donde fueron sorteados tres jueces.

En tanto, el juez Javier Ríos, a cargo de la causa, mandó a analizar los restos que había en una aspiradora secuestrada en la madrugada del último sábado, luego de la declaración de un peluquero vecino al edificio que planteó que ese artefacto pudo haber sido usado para limpiar la escena del crimen.

También se aguardaban para el próximo miércoles los informes de los peritos forenses sobre restos encontrados en la portería y un auto de Mangeri.

Hoy, al reanudarse la actividad judicial, el juez Ríos envió a la Cámara del Crimen la apelación de la defensa del portero, procesado con prisión preventiva y embargado en un millón de pesos.

Mangeri está acusado de homicidio agravado por alevosía por el crimen de Angeles Rawson, una menor de 16 años que vivía en el edificio en donde el imputado trabajaba y que desapareció el 10 de junio pasado cuando regresaba de su clase de gimnasio.

El cadáver de la menor apareció al día siguiente en el predio del CEAMSE de José León Suárez, pero aunque en un primer momento la sospecha pública apuntó a la familia de la víctima el propio Mangeri fue llevado a la fuerza a declarar como testigo y terminó confesando: "fui yo".

Esas palabras, sin embargo, no fueron tomadas en cuenta en el procesamiento en donde fue clave el resultado de las pericias de ADN que determinaron que bajo las uñas de Angeles había muestras genética de Mangeri.

Ahora, el caso recayó por sorteo en la Sala Sexta del tribunal, en donde los camaristas Marcelo Lucini, Mario Filozof y Matías Pinto serán los encargados de confirmar o revocar el procesamiento de Mangeri.

No obstante, esos magistrados todavía no están en condiciones de adentrarse en el estudio del procesamiento de Mangeri, pues previamente debe resolver dos "nulidades" pedidas por los abogados defensores Miguel Angel Pierri y Marcelo Biondi.

Uno de los escritos está vinculado con la "indagatoria encubierta" a que -según la defensa- habría sido sometido Mangeri por parte de la fiscal María Paula Asaro, en tanto que la segunda "nulidad" se relaciona con supuestas irregularidades en la "cadena de custodia" del ADN hallado en las uñas de la víctima.

Sobre este último planteo, aún están corriendo los plazos para la apelación, por lo que la Sala Sexta podría comenzar a ocuparse del expediente hacia principios de la semana próxima.

Con un nuevo fiscal subrogante por unos días(con Asaro de licencia, la reemplaza Fernando Fiszer), el juez Ríos avanza en detalles para profundizar los indicios que aparecen.

Por eso tomó en cuenta los dichos de un peluquero que el viernes pasado aseguró que el 14 de junio pasado -cuatro días después del crimen de Ángeles- el portero lo había visitado para pedirle que le entregara un papel a la vecina del sexto piso del edificio de Ravignani 2360.

El peluquero contó que la situación le llamó la atención y que leyó la misiva que tenía que entregar en la que decía: "Sra. Sofía. Soy Mangeri. Por favor deje la aspiradora donde estaba", con la intención de llevarla desde la terraza hasta la portería.

29 de julio de 2013

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